El Tribunal de Cuentas considera "bastante probable" que la firma pública deba compensar a la empresa de Albuixech, que recibió un encargo de hasta 28 trenes para una infraestructura que fue descartada por Fomento
VALENCIA. Vossloh España, firma radicada en Albuixech, ha presentado una demanda civil contra Renfe Viajeros por anular un contrato en el que estaba prevista la fabricación de hasta 28 trenes para abastecer la red de tranvía de León. En concreto, la compañía valenciana reclama una indemnización "de más de 47 millones de euros".
Así consta en un informe del Tribunal de Cuentas al que ha tenido acceso Valencia Plaza sobre las inversiones de la extinta firma pública Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha (Feve), absorbida posteriormente por Renfe. El documento cuestiona multitud de aspectos sobre la licitación de la entidad, hasta el punto que considera "bastante probable" que "Renfe Viajeros o Renfe Operadora deban finalmente hacer frente a una elevada indemnización".
TRAS HABER ADJUDICADO EL CONTRATO, Feve cambió el número de trenes encargados, su tipología y hasta el lugar para el que los requería
Antes de ser anulado hubo un sinfín de cambios en el contrato, que en principio contemplaba los trenes para unir en tranvía Cartagena con el Mar Menor, según el documento. Además de modificar su lugar de destino, tras la adjudicación, Feve cambió también la tipología de los trenes requeridos -que en un principio eran cuatro-, eliminó de la negociación la adquisición de piezas y recambios a las que se había comprometido y, por último, incluyó en el contrato el compromiso de adquirir un total de 28 trenes en el plazo de dos años.
Sobre esta última cuestión el Tribunal de Cuentas recalca que se trata de "una modificación sustancial", al considerar que, de haberse conocido desde el principio este aspecto, "hubiese podido suscitar el interés de más fabricantes". De hecho, tal circunstancia fue una de las esgrimidas para anular el acuerdo alcanzado con Vossloh España, además del motivo principal: Fomento renunció a construir el tranvía al Hospital de León.
Fue entonces cuando arrancó verdaderamente el tira y afloja entre el operador público y la ingeniería ferroviaria valenciana. Pese a las irregularidades manifiestas en el proceso de adjudicación, la Audiencia Nacional falló contra la anulación del contrato, un fallo que fue recurrido por la administración estatal y que está todavía a la espera de resolución.
Con el fin de enmendar el perjuicio al adjudicatario, la empresa pública Ineco realizó un informe para calcular los costes soportados por Vossloh España, que antes de la renuncia a la infraestructura había recibido tres encargos para construir un total de 12 trenes de diferentes características. El documento determinó que la firma había invertido 43,8 millones de euros, de los cuales, tras descontar las cantidades que ya habían sido abonadas, restaba una deuda de 37,7 millones.
Vossloh, no obstante, inconforme con estas cantidades, presentó en septiembre de 2014 una demanda civil en la que reclama 47 millones de indemnización, una cantidad que, si se cumple el pronóstico del Tribunal de Cuentas, es "probable" que sea recuperada por la mercantil de Albuixech.