VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Xirivella ha cerrado el ejercicio contable de 2021 con un remanente de tesorería de 7 millones de euros. Así, el consistorio ha destacado la reducción del periodo medio de pago, que se sitúa en 13,1 días, y el nivel de deuda viva, que baja al 34,9 %, "lejos del 110% permitido", han subrayado.
Además, han explicado que la administración local cuenta con una capacidad de financiación de más de 3,5 millones de euros. "Uno de nuestros objetivos en esta legislatura ha sido reducir la deuda municipal sin desatender el mantenimiento y las mejoras de la ciudad. Con las cuentas públicas saneadas vamos a realizar potentes inversiones a muy corto plazo. Esa es nuestra hoja de ruta: garantizar la solidez financiera y el bienestar ciudadano para que Xirivella crezca a todos los niveles", ha asegurado el alcalde, Michel Montaner.
De esta forma, del remanente destinarán 3,9 millones a inversiones para este año 2022, según han pactado los dos socios de gobierno -PSPV y Podem- y Compromís. De este acuerdo, el ayuntamiento ha señalado la importancia de la redacción de un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), ya que pretenden destinar medio millón de euros y supondrá una nueva reestructuración urbana en la ciudad, que hasta ahora se rige con el PGOU del año 1987.
Asimismo, han señalado que los remanentes van a permitir mejorar la red de suministro de agua potable con una aportación de 450.000 euros. A su vez, se ha destinado una partida de 650.000 euros para asfaltado y adecuación del firme, otra de 300.000 euros para mobiliario urbano, una de 150.000 para la mejora de las aceras en la Avenida de la Paz, 50.000 para ajardinar la zona del IES Gonzalo Anaya y 20.000 para reordenar la zona de La Closa; además de invertir 250.000 euros para la modernización del alumbrado público.
Por otro lado, han explicado que parte del sobrante irá a potenciar los carriles bici con la redacción de dos nuevos proyectos y la ejecución de un tercero. En cuanto a deportes, se va a renovar el césped del fútbol 8 del polideportivo Ramón Sáez, con un coste de 200.000 euros. Otros 70.000 euros irán para las gradas del campo de fútbol del Barrio de la Luz.