El año perdido del Centre del Carme
Un año después del cese de Pérez Pont el centro sigue sin crear la plaza de director artístico y ya acumula cerca de diez exposiciones suspendidas
VALÈNCIA. El Centre del Carme Cultura Contemporània da comienzo este jueves, 12 de noviembre, a la primera edición del ciclo Conciertos desde la cama. Una iniciativa de Cero en Conducta y Vibra Mahou, que cuenta con el apoyo del Consorci de Museus, con el objetivo de facilitar encuentros de calidad en torno al directo. Las actuaciones correrán a cargo de dos representantes del sonido bedroom pop; la murciana de origen ucraniano Yana Zafiro y el artista valenciano Popin’love.
Los conciertos se celebrarán en el Claustro Gótico del Centre del Carme, donde los artistas realizarán su actuación desde la cama; una cama llevada al escenario y desde la cual no solo se pueda asistir a un concierto de música en directo, sino que el espectador pueda participar de una creación escénica, basada en lo intrusivo y en lo inclusivo.
El ciclo está basado en la creación de sinergias entre diferentes disciplinas, dando lugar a una propuesta artística que mezcla música, escenografía, teatro o interpretación. Esta original propuesta adapta la experiencia de las actuaciones en vivo en tiempos millennials, para disfrutar del sabor del directo de una forma única.
El director del Centre del Carme, José Luis Pérez Pont ha señalado que “tras varios meses celebrando la recuperación del arte en vivo, desde el Centre del Carme hemos demostrado que la cultura es segura, siguiendo todas las recomendaciones que marca la normativa para la prevención de la covid-19. Con estos conciertos continuamos impulsando el sector cultural valenciano y a sus artistas, acercando nuevos lenguajes y formatos artísticos a la ciudadanía”.
Yana Zafiro no entiende de fronteras ni de etiquetas. En sus canciones mezcla castellano e inglés, se pasea por la electrónica o el pop de dormitorio y le queda tiempo para estar conectada con la escena de fanzines y el arte contemporáneo de su ciudad. Su primer EP, Mi perro se va a morir reúne cuatro piezas deslumbrantes en las que hace alarde de talento y desparpajo. Sus letras están llenas de ingenio, ironía y alienación postadolescente. Yana hace cosas especiales, como demuestra ‘Crepúsculo’, el primer adelanto del que será su álbum y que sale a la luz este mes de noviembre.
Popin’love, integrante del colectivo Toxic Pop, es un proyecto que surge sin querer como una vía de escape emocional. Mediante producciones de ‘hyper-pop’ y versos de naturaleza abstracta, invita al oyente a una experiencia auditiva tóxica.
A las actuaciones de Yana Zafiro y Popin’love les seguirán los conciertos de Jazzboy y Casero el 17 de diciembre. Por su parte, mori, Rusowsky y laborde serán los últimos en meterse en la cama del Centre del Carme el 15 de enero.
Dado el carácter íntimo de los conciertos, y siguiendo las recomendaciones sanitarias por la covid-19, el aforo se limitará a 150 personas sentadas y se garantizará la distancia mínima interpersonal de 1,5 metros. Igualmente, el uso de mascarilla será obligatorio tanto para acceder al espacio como durante los conciertos.
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