CASTELLÓ. Si hay una labor que ha estado vinculada siempre al mundo rural, esa es la gestión forestal. Una tarea que con el abandono de masías y el constante éxodo de la población del interior se ha tenido que profesionalizar y ahora ya se puede considerar como una tarea generadora de empleo y fundamental para el mantenimiento de las áreas rurales. Con esas premisas se fundó en 2005 la empresa Forestal del Maestrazgo, ubicada en la localidad de Todolella, en la comarca de Els Ports.
La firma nació con el objetivo de dar servicio al sector agrícola y forestal, ofreciendo los servicios de desbroce y limpieza de montes. En la actualidad gestiona 10.000 toneladas de residuos agrícolas y forestales, mayoritariamente pino, que recoge en un 90% de montes de Teruel y un 10% de Castellón, según explica Daniel Gascón, que junto con Jaime Querol se encarga de gestionar la empresa. "Los trabajos de mantenimiento del monte son duros y no todo el mundo está dispuesto a hacerlos", dice Daniel, quien lamenta que desde la Administración "no se dan todas las facilidades que se deberían dar a las empresas del sector para trabajar, no se pueden hacer los trabajo como los hacían nuestros abuelos hace 60 o 70 años".
El gerente de Forestal del Maestrazgo considera que el desbroce y retirada de residuos "es un trabajo necesario para el mantenimiento de los bosques y montes, puesto que ayuda a mitigar el peligro de propagación de incendios y de plagas y además contribuye a generar biomasa, un combustible ecológico que ayuda a reducir la contaminación y que es más barato que combustibles fósiles como el gasóleo".
En 2010 la empresa apostó por una nueva línea de negocio y también inició la transformación de los residuos forestales en biomasa, para lo que puso en marcha la planta de clasificación de astillas de Todolella, desde donde aún suministran biomasa a sus clientes. Entre ellos, se han especializado en la promoción e instalación de calderas y equipos de consumo de biomasa.
Consecuencia, en parte lógica, de la gestión sostenible de los montes cercanos a la población es la implantación en el municipio de una red de calor y cogeneración alimentada con calderas de biomasa a la que se pueden conectar todas las viviendas para abastecerse de calefacción y agua caliente. Esta iniciativa surgida desde el Ayuntamiento supone un ahorro cercano al 60% en la factura de los vecinos de la población. Un ejemplo que también ha continuado Portell y que ha situado a los dos municipios como espacios libres de contaminación.
Según algunos estudios, las redes de calor o redes de District Heating con biomasa ya solo son superadas en Europa por las redes de gas. Incluso en algunos países, los nórdicos, ya es la biomasa la principal productora de calor térmico. No obstante, Daniel Gascón explica que sobre el año 2014, y hasta el 2016, "hubo un boom de consumo de esta materia prima, pero en los últimos años se ha estancado, por factores que pueden ser culturales, ya que las personas solemos tender a la comodidad y el mantenimiento de calderas o aparatos de calefacción alimentadas con biomasa necesita una atención continua, o por la bajada del precio del gasoil, lo cual reduce el porcentaje de ahorro".
La labor de Forestal del Maestrazgo es dotar de biomasa residual a todas las iniciativas que quieran utilizar ese combustible como fuente de energía "a través de una gestión forestal sostenible y un mantenimiento adecuado de los montes, que posibilita, no solo el ahorro energético, sino la prevención de incendios y crear numerosos puestos de empleo, propiciando que la gente trabaje en el territorio y se frene la despoblación", explica.
En la actualidad son 17 las personas que trabajan en esta empresa de Todolella, todos vecinos de municipios como La Mata, Olocau, Morella, Cinctorres, Aguaviva, Fuentespalda (estos dos en Teruel) o la misma Todolella.
Además del propio pueblo, los clientes de la firma son colegios, residencias de mayores, granjas, mataderos o empresas, explica Gascón. Este además señala que también sirven a particulares a través de su almacén de pellet de Moixent. La empresa cuenta con una red de distribución que abastece a municipios de la Comunitat Valenciana, Cataluña y Aragón.
Para el gerente de la empresa de Todolella, una de las necesidades de la firma, y también de todo el sector, es poder mecanizarse para afrontar los retos del futuro y evolucionar en la gestión sostenible de los montes. No en vano, la transformación de los residuos forestales en biomasa ofrece la posibilidad de producir energía sostenible, autóctona y económica, y evitar, así, la dependencia de terceros países a nivel energético.