Esperamos que el Banco de Inglaterra mantenga los tipos de interés estables en el 5,25% en su próxima reunión del 9 de mayo. La atención se centrará en el tono general del Comité de Política Monetaria (MPC) que, además de las previsiones actualizadas de inflación y crecimiento, podría dar señales implícitas sobre el calendario de un primer recorte de tipos. En general, esperamos que el Comité de Política Monetaria confirme su tono más moderado de marzo, ya que la inflación general ha sido más o menos la esperada y el mercado laboral muestra signos más claros de enfriamiento. Ambas son condiciones previas esenciales para bajar los tipos.
No obstante, como dice el refrán, el diablo está en los detalles. Tanto los precios de los servicios - especialmente propensos a los efectos de segunda vuelta- como los salarios regulares del sector privado siguen subiendo al 6% interanual, respectivamente. Al mismo tiempo, la economía se está reactivando, lo que puede estimular aún más la inflación. Los recientes comentarios del Banco de Inglaterra apuntan a un comité altamente dividido. Algunos miembros expresan una gran confianza en que la tendencia desinflacionista general sigue intacta, mientras que otros se muestran más preocupados. Tras una reunión de mayo con un relativo consenso, es probable que esta división se aclare en junio. Seguimos pensando que una mayoría (relativamente escasa) votará a favor de un primer recorte en junio, vinculado a la constatación de que incluso un tipo de interés bancario algo más bajo sigue siendo restrictivo. Pero los riesgos se inclinan hacia un inicio más tardío, por lo que la dependencia de los datos sigue siendo elevada.