MADRID (EP). La junta de accionistas de Bodegas Riojanas ha aprobado el reparto de un dividendo de 0,14 euros brutos por acción, con cargo a los resultados del ejercicio pasado, informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, el pago del dividendo será el 14 de julio y tendrá un importe total de 745.000 euros, reservando el resto a reservas de la compañía, y detrayendo el dividendo correspondiente a las acciones de autocartera que la sociedad posea en el momento del pago del dividendo.
La bodeguera ha explicado que su importe se hará efectivo conforme a las disposiciones vigentes para las entidades depositarias y se ha nombrado al Banco Popular como agente de pagos.
Los accionistas aprobaron la cuenta de resultados del ejercicio 2015, donde la bodega cerró con un beneficio neto de 988.000 euros, un 10,7% más que el ejercicio anterior, mientras que elevó un 2,9% su facturación, hasta los 17,5 millones de euros.
Por otro lado, el presidente de Bodegas Riojanas, Luis Zapatero, ha mostrado su satisfacción por los resultados positivos obtenidos en el último ejercicio y ha destacado la recuperación conseguida en los años 2014 y 2015.
Caída del consumo
"Ha sido necesario superar la caída del consumo debida a la crisis económica, que nos ha exigido esfuerzos para el incremento de la acción comercial en todos los mercados, que además presentaban exigencias importantes en materia de precios para poder ser competitivos", manifestó.
Para el presidente del Grupo Bodegas Riojanas, los esfuerzos realizados en los últimos años en el desarrollo de una red comercial que ya se extiende por 23 países han dado como fruto el fuerte incremento de las exportaciones en un 44 por ciento, con Reino Unido, Irlanda, Estados Unidos, México, Alemania, Dinamarca y China como destinos más significativos.
Esta clara apuesta por la internacionalización seguirá siendo en palabras de Luis Zapatero uno de los tres ejes fundamentales de la estrategia de futuro de Bodegas Riojanas, junto a la mejora continua de la calidad de los vinos mediante el desarrollo de proyectos innovadores de I+D+i en el campo de la viticultura y la enología, tanto propios como de ámbito europeo, y junto al avance en la tecnología aplicada a los procesos productivos y de gestión.
