FOTO: KIKE TABERNERVALÈNCIA. (EFE). La presidenta del PP de la Comunitat Valenciana, Isabel Bonig, se ha comprometido a aplicar una "bajada masiva" de impuestos y a apostar por una "inmersión lingüística, pero en inglés", de forma que uno de cada cinco colegios públicos tengan el 80 % de las clases en inglés.
Bonig ha anunciado varias medidas para que el PPCV vuelva a gobernar en 2019 durante una conferencia en el Fórum Europa Tribuna Mediterránea, donde le ha presentado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quien ha resaltado de ella "su perseverancia, responsabilidad y entrega".
Reformar el sector público para eliminar "chiringuitos", volver a implantar el distrito único para la elección de centro escolar, blindar por ley los tiempos máximos de lista de espera para la atención especializada no urgente, o una deducción en el IRPF de 600 euros por hijo durante cinco años, son otros compromisos.
La presidenta del PPCV ha aseverado que este partido ha pasado y está pasando "mucho", a pesar de lo cual están "de pie", están "vivos" y van a batallar, así como a ganar las próximas elecciones y a gobernar.
Preguntada sobre si Esteban González Pons o María José Catalá asumirán la candidatura a la alcaldía de València, Bonig ha indicado que van a elegir "al mejor candidato o candidata para ganar", que ambas personas son "magníficas" y que hay "obsesión" por saber quién ocupará la candidatura porque saben que el PP va a ganar y gobernar.
Por otra parte, Bonig ha reprochado al president de la Generalitat, Ximo Puig, que quiera "abrir el melón de la reforma constitucional" en este momento y sin tener claro si todo el PSOE aboga por lo mismo, y le ha recomendado que se dedique a resolver los problemas de la gente en lugar de "embarcarse" en esto.
Según la dirigente popular, el paso siguiente que va a dar el nacionalismo en España va ser tener nuevos actores -Podemos y Compromís- y nuevos territorios -Navarra, Galicia, Baleares y la Comunitat-, así como demandar una reforma constitucional para que tenga cabida el nacionalismo.
Ante esto, ha considerado que el centro derecha tiene que abanderar "un nuevo concepto de patriotismo español", que no sea excluyente, sino que vuelva a defender un proyecto común de nación y de ciudadanos libres e iguales en derechos, desde la diversidad y la pluralidad.
Bonig ha reivindicado que la Comunitat es un territorio "fundamental" para mantener la cohesión, la vertebración y la unidad de España, y ha alertado contra los partidos políticos que ven en el proceso separatista de Cataluña "su paraíso en la Comunitat", una región que no quiere crecer "contra Cataluña", sino con ella.
Frente al actual Consell que, a su juicio, adoctrina y no gestiona, Bonig ha reivindicado la libertad económica, educativa, cultural o en la elección de los servicios públicos, y ha insistido al PSOE en la necesidad de pactar la nueva financiación autonómica y en que la "confrontación permanente" con el Gobierno de España no va a solucionar nada.
En materia de agua, ha propuesto que los políticos den un paso atrás y que se deje a los regantes de las comunidades autónomas llegar a acuerdos, y en materia cultura se ha comprometido a apostar por los festivales musicales para situar a la Comunitat "a la altura de Nueva York o de Londres".
Bonig ha instado finalmente a "cerrar el capítulo de la Guerra Civil española", porque "ya está bien de reabrir y de revivir el odio y el rencor" que llevó a esta contienda.
Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno ha indicado que el liderazgo de Bonig en el PPCV permitirá que la Comunitat "vuelva a la senda del progreso, de la modernidad y a un Gobierno para mejorar la vida de los valencianos".
