Francisco Gómez, presidente de CoepaALICANTE. El comité ejecutivo de la patronal alicantina, Coepa, ha aprobado este lunes el convenio con los acreedores y el plan de viabilidad que debe presentar al administrador concursal antes del próximo jueves para ser analizado en la reunión de acreedores prevista para el 11 de noviembre. Según fuentes de la organización empresarial, el convenio se sustenta esencialmente en dos propuestas básicas, sin cuya aceptación la viabilidad de Coepa está más que en entredicho.
La primera de estas propuestas, que parece destinada al fracaso, es la dación en pago del controvertido centro de oficios de la patronal en el polígono industrial de Babel. Dado que no puede afrontar la devolución del crédito de 3 millones de euros concedido por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) para su construcción, Coepa propone que el organismo autonómico de por satisfecha la deuda quedándose con el edificio (sin actividad desde 2012).
La idea de Coepa de que el IVF ejecute la hipoteca y se cobre la deuda con el propio edificio, no obstante, se enfrenta a dos obstáculos que parecen complicar sobremanera los planes de la patronal alicantina. El más obvio es que el solar sobre el que se asienta el edificio es de titularidad municipal, por lo que habría que implicar al Ayuntamiento de Alicante en el acuerdo con el Consell. El segundo, que el IVF desconfía de la tasación con la que cuenta Coepa y que ha sido entregada por el administrador concursal al titular del juzgado de lo Mercantil 1. Según esta tasación, el centro de oficios valdría 4,3 millones de euros, mientras que Coepa adeuda 3 millones más 900.000 euros de intereses al IVF.
La querella presentada por el Servef contra la organización empresarial (y desvelada por Valencia Plaza) por fraude en subvenciones, estafa, apropiación indebida e insolvencia punible en la tramitación de 1,9 millones de euros en subvenciones, de hecho, considera que la valoración que la patronal realiza del centro de formación que pretende dar en pago está hinchada, según un informe de la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE) fechado el pasado mes de mayo.
La segunda propuesta, que tampoco parece gozar del favor de los interesados, es una quita del 95% de la deuda que Coepa mantiene con sus acreedores, especialmente con la patronal autonómica, Cierval (de la que forma parte). La confederación empresarial alicantina adeuda a la patronal autonómica unos 500.000 euros en cuotas. La propuesta pasa por que Cierval renuncie a la mayor parte de esa deuda. Según las fuentes consultadas, esa cantidad está "provisionada". No obstante, en la patronal autonómica no ven con buenos ojos renunciar a la deuda, por lo que parece poco factible que el planteamiento de Coepa prospere.
Una tercera pata del plan de viabilidad asume que la patronal alicantina podrá fraccionar el pago de la deuda que mantiene con el Fogasa por los despidos de los dos ERE, y que asciende a 900.000 euros. Coepa quiere negociar la satisfacción de esta deuda a lo largo de varios años, según las mismas fuentes.
Y aún hay una cuarta propuesta que, una vez aceptadas todas las anteriores, resulta irrenunciable para que la patronal alicantina sea viable, según las fuentes consultadas: llevar a cabo una derrama entre sus asociados y, en caso de superar el concurso de acreedores (una posibilidad que se antoja muy lejana pero en la que aún confía el presidente, Francisco Gómez), subir las cuotas que pagan ahora mismo por los servicios que presta la patronal, que además se readaptaría para funcionar "con tres o cuatro personas" en plantilla y financiándose exclusivamente con las cuotas de los socios.
En el trasfondo, subyace el debate sobre cuál debe ser el futuro de Coepa. Su actual presidente, Francisco Gómez (en el cargo desde marzo por la dimisión de Moisés Jiménez) pretende salvar la estructura actual para mantener su representatividad en la CEOE. Algo que solo sería posible si se acepta el convenio de acreedores. Otros dirigentes empresariales, como el presidente de Cepyme Alicante, Cristóbal Navarro, apuestan en cambio por fundar una nueva patronal sin las ataduras de Coepa. Siempre que sea posible sin incurrir en sucesión de empresa.
