VALÈNCIA (EFE). El tribunal que juzga al expresident de la Generalitat Francisco Camps por la trama Gürtel ha rechazado la abstención formulada por un ex alto cargo autonómico que ha revelado que le encargaron desde la Generalitat un informe "en defensa" de la administración tras las sospechas de la Policía sobre el caso Gürtel.
La Audiencia Nacional ha considerado que Jesús Emilio Torrejón, el ex director general de la Abogacía General de la Generalitat, citado como perito la semana que viene en el juicio "no tiene capacidad legal de abstenerse" y tiene "la obligación legal de comparecer".
De esta forma ha rechazado la sección segunda de lo Penal la solicitud de este ex alto cargo para que se anulase su citación y se retirase del procedimiento el informe que elaboró y que obra en la causa, al considerar que se realizó "desde una perspectiva de defensa de la legalidad de la actuación de la Administración" valenciana.
Torrejón argumentó en un escrito remitido al tribunal que la entonces abogada general de la Generalitat le pidió que elaborase un informe "para analizar" y "dar una respuesta jurídica" al que había realizado previamente la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía, que "ponía en entredicho la celebración de una serie de contratos" de la Generalitat en el marco del caso Gürtel.
Para hacerlo, explicaba en su escrito, no tuvo acceso a dichos contratos, sino solo al informe de la UDEF, de modo que entiende que la inclusión del trabajo que realizó en el juicio "busca de forma indirecta defender la posición jurídica de los investigados", algo que impide en la ley.
Durante la jornada de este martes, la primera celebrada tras el parón del verano, el tribunal ha escuchado a los últimos testigos, entre ellos a quien fuese secretaria de Camps durante ocho años, que ha asegurado que nunca vio al expresident reunirse con el empresario de Gürtel, Álvaro Pérez, El Bigotes.
Su nombre, ha dicho, nunca figuró en ninguna de las agendas del expresidente valenciano, y ha asegurado que ni lo vio en el Palau de la Generalitat ni le pasó nunca ninguna llamada suya, ni vio a Camps hablando con él.
Ha explicado que nadie podía acceder al Palau si no estaba en la agenda, aunque más tarde ha admitido que si llegaba alguien que decía que tenía una reunión y no estaba en agenda, las secretarias o asesores le atendían y le avisaban por si podía ser atendido en otro momento.
En cualquier caso, ha insistido en que "no había imprevistos" en la agenda del expresident, y ha subrayado que "nunca" ha recibido un regalo de la empresa de Gürtel en Valencia, Orange Market, ni tiene "noticia de que nadie de Presidencia lo hubiera recibido".
Además de Camps, para quien la Fiscalía pide 2 años y medio de prisión y 10 de inhabilitación, más de una veintena de acusados se sientan en el banquillo en este juicio, que la Audiencia Nacional reanuda este martes, por presuntas adjudicaciones irregulares a la trama Gürtel, incluidos varios exconsellers y ex altos cargos de la administración valenciana.
La Audiencia Nacional no ve ningún delito en la actuación del expresidente de la Generalitat respecto a las adjudicaciones y contrataciones con la trama; la sentencia absuelve a Alicia de Miguel, Manuel Cervera, Luis Rosado y David Serra, aunque condena a varios cargos del Consell