VALÈNCIA. El expresidente de la Generalitat Francisco Camps ha acudido este viernes a declarar como investigado dentro de la causa que investiga el ‘pufo’ de la Fórmula 1. Según han explicado fuentes presenciales a Valencia Plaza, Camps ha tenido bronca tanto con el abogado del PSPV como con el fiscal Anticorrupción y el abogado de la Generalitat al que le ha llegado a decir: “Me duele mucho el tono de sus preguntas”.
En cuanto a la declaración, el expresidente no solo ha negado tener conocimiento sobre el coste económico de las carreras para la Generalitat -unos 270 millones de euros, según un informe, como este periódico- sino que en declaraciones a los periodistas a la salida del juzgado ha llegado a decir que el Gran Premio de València es "el proyecto más rentable de la historia de la Comunitat Valenciana, sin lugar a dudas".
En una maniobra de intento de salvación, el exjefe del Consell ha encendido el ventilador y ha asegurado que a Belén Reyero, su mano derecha en el tema de la F1, la contrató su jefa de gabinete, Ana Michavila y que, él, no tenía ningún conocimiento sobre las pérdidas de la Fórmula 1 porque “sus vicepresidente Vicente Rambla y Gerardo Camps nunca le informaron de ello”.
En cuanto a las responsabilidades, Camps las ha derivado a otro expresidente de la Generalitat, José Luis Olivas, del que ha dicho que fue él la persona que “organizó todo en la Fórmula 1” y que su relación con el mandamás de la F1, Bernie Ecclestone, era “simplemente protocolaria”, y no hablaban sobre la organización. Un hecho que quedaría totalmente desmentido simplemente echando un vistazo a algunos de los más de 100.000 correos electrónicos de los que se incautó la policía, y en los que han basado su último informe. Un informe de 416 páginas que ha llevado a Reyero a pactar con la Fiscalía Anticorrupción.
Las declaraciones realizadas hasta el momento ponen de manifiesto que el “cante” de Reyero ha hecho que los investigados muestren, mucho más de lo habitual, su nerviosismo ante una instrucción judicial que avanza viento en popa y que, este viernes, se ha cobrado diez nuevas imputaciones.
Entre los diez nuevos investigados se encuentra el exdirector del circuito Ricardo Tormo de Cheste, Julio García, quien el pasado marzo ya declaró como testigo. García es hermano del exdirector de RTVV, Pedro García, investigado en el caso Gürtel.
Según ha informado este viernes el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat (TSJCV), los nuevos investigados en el caso Valmor por las irregularidades en la organización de la Fórmula Uno tendrán que declarar en el Juzgado de Instrucción 2 de Valencia los días 5, 6 y 7 de junio.
El resto de investigados citados a declarar en la providencia dictada este jueves son José Miguel Escrig, Juan Pérez Milla, Miguel Martí Trenor, Desamparados del Valle, Blanca Tomás, Francisco Javier Salamanca, Ricardo Valles, José Llixiona y Miguel Navarro Máñez.
A su salida de la Ciudad de la Justicia, el exjefe del Consell ha lamentado que "alguien cortó la F1" en València porque "el proyecto era a larguísimo plazo" y "Barcelona continúa haciendo la F1 y yo no sé por qué los valencianos no podemos tener F1 y Cataluña sí". A este respecto, se le ha preguntado si hubiera acabado siendo rentable si no se hubiera "cortado" el proyecto, a lo que el expresidente ha reivindicado: "Es el proyecto más rentable de la historia de la Comunitat Valenciana, sin lugar a dudas" y ha añadido: "En 2008 ya ingresamos en renta de economía valenciana más de 400 millones".
Sin embargo, en el documento de la UDEF se recoge un informe de balance económico de la F1 --fechado en mayo de 2012 y enero de 2013-- y elaborado por el en esa fecha y actualmente director del Circuito, Gonzalo Gobert, donde se cifra en 210 millones de euros los pagados por el canon y otros servicios en el acumulado de siete años y unas pérdidas de 270 millones sin tener en cuenta la inversión inicial.