El portavoz de Ciudadanos en Les Corts, Alexis Marí. Foto: EVA MAÑEZVALENCIA. La ruptura en Ciudadanos se ha ido evidenciando en las últimas semanas. Con la discusión ideológica de fondo entre regionalismo o no y acercarse más al conservadurismo o gozar de un perfil más progresista, el día a día de la formación es cada vez más complicado. A la irrupción de un grupo de militantes críticos -TranC'sparencia- que reclaman "más transparencia y democracia interna" y los movimientos de Carolina Punset para disputarle la presidencia del partido a Albert Rivera, se suman ahora desacuerdos en Les Corts sobre la candidatura que los naranjas presentarán para la renovación del Consell Jurídic Consultiu.
Hace dos semanas se confirmaba que el grupo parlamentario que lidera Alexis Marí como síndic se inclinaba por el magistrado José María Tomás y Tío como candidato para renovar el órgano consultivo. Sin embargo, este martes se daba un revés a esta decisión. Un sector de la dirección del grupo parlamentario decidía presentar un candidato alternativo -esta vez un magistrado alicantino- y exigía que se procediese a votación para dirimir al elegido que la formación debe elevar antes del próximo lunes, cuando finaliza el plazo para que los grupos propongan sus aspirantes.
Una coyuntura atípica dado que, según fuentes consultadas por Valencia Plaza, la candidatura de Tomás y Tío ya había recibido la aprobación de la dirección nacional. No obstante, por la mañana se procedía a la votación en la cúpula del grupo parlamentario y los resultados ratificaban al aspirante ya anunciado, aunque no sin disputa. Mientras el portavoz adjunto Alberto García y el síndico de Ciudadanos, Alexis Marí, secundaron a Tomás y Tío, la otra portavoz adjunta María del Carmen Sánchez y el coordinador del grupo, Juan Córdoba, hicieron lo propio con su candidato, el magistrado alicantino.
Produciéndose tal empate, el apoyo de Alexis Marí desatascaba la elección por el mayor peso que lleva aparejada la condición de portavoz parlamentario: el voto de calidad. No obstante, en la reunión estuvo presente con voz pero sin voto el secretario de la Mesa de Les Corts y delegado territorial de C's, Emilio Argüeso, quien según el sector de Marí manifestó su desacuerdo por no participar en el referendo así como por la decisión adoptada, trasladando su disconformidad a la dirección nacional del partido.
Pero el conflicto, lejos de quedar resuelto, vivió un segundo asalto por la tarde en la reunión de grupo ordinaria, a la que no acudió Marí y algún otro diputado. Una cita en la que se revivieron los momentos de tensión que se respiraron durante la mañana cuando algunos miembros del grupo en Les Corts plantearon volver a someter a votación ambas candidaturas, una situación que no llegó a concretarse según las fuentes del grupo consultadas por este diario.
Sin embargo, parece que el sector crítico con Marí no dará por vencida la batalla dado que aseguran que la decisión sobre el representante del CJC no le corresponde tomarla a la dirección, sino al grupo mediante sufragio y, para ello, todavía contarían con un plazo razonable hasta el 5 de diciembre.
Las fuentes oficiales admitieron la existencia de discrepancias respecto al nombre a presentar por la formación naranja, aunque restaron importancia a estos desacuerdos porque, a su juicio, forman parte del "debate de todos los partidos democráticos en los que es normal que cada uno exprese sus opiniones y preferencias". En este sentido confirmaron que se barajan varios candidatos y que la decisión no será definitiva hasta el próximo lunes.
Por otro lado, la reunión celebrada por la tarde también abordó otros temas que han generado divergencias entre los diputados. Según confirmaron a este diario, el grupo retirará próximamente una enmienda a los Presupuestos de 2017 que presentó de forma conjunta con los socialistas el pasado jueves para blindar las retribuciones en los puestos de mayor responsabilidad del Ejecutivo.
La propuesta, motivada por el deseo de "dignificar" el trabajo de quienes ocupen los puestos clave de gestión, demandaba establecer un nuevo marco retributivo para los altos cargos cuyos salarios nunca podrían ser inferiores a los de los funcionarios de carrera de la administración autonómica con una serie de complementos adicionales. Sin embargo, finalmente el PSPV caminará en solitario en la defensa de esta propuesta que deberá votarse en la comisión de Economía, Presupuestos y Hacienda la próxima semana.
Así pues, unos hechos que evidencian, tal y como había informado este diario, la fractura del grupo parlamentario debido a la doble estrategia política e ideológica que late en el seno de este partido en la Comunitat. Una separación que divide el alma de la formación naranja al 50% dentro de su bancada que dificulta la posibilidad de llegar a consensos dentro del Parlamento valenciano y que, visto el movimiento de sus críticos, pone incluso en peligro la portavocía que ostenta Alexis Marí.
