Foto: C.LUJÁN/EPVALÈNCIA (EP). La ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, ha defendido que las cuestiones fundamentales, como la política exterior, deben ser pactadas en el seno del Ejecutivo de coalición y ha precisado que llamar a actuar ante el "genocidio planificado" de Israel en Gaza no entraña "un problema de competencias", sino reaccionar por "humanidad" y en defensa de los derechos humanos.
Eso sí, ha dejado claro hay que tener en cuenta la correlación de fuerzas, dado que hay un socio mayoritario y otro minoritario, como se ha hecho en competencias que ostentaba Unidas Podemos como es igualdad o trabajo.
También ha dejado claro que las demandas de su formación, como romper relaciones con Israel o pedir sanciones para el primer ministro Benjamín Netanyahu, no son una "amenaza" ni una "línea roja" de cara a la futura investidura.
Así se ha manifestado en declaraciones a los medios tras acudir a la inauguración del XIII Congreso de CESIDA, tras ser cuestionada por las palabras de ayer de la ministra de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra, al recalcar que las posiciones que defiende ante Israel deberían estar representadas en el Gobierno y proponer quelas "posiciones trascendentales para el futuro del país, como la política exterior", se pacten en un futuro gobierno de coalición.
De hecho, Belarra dijo que es "un error y una anomalía que la fuerza mayoritaria se arrogue toda la responsabilidad y competencias en una materia de tal calado" como la política exterior.
Por su parte, Montero ha denunciado que lo que está ocurriendo en Gaza es un "genocidio planificado" por Israel y que actuar para "pararle los pies" a Netanyahu no es una cuestión de competencias en el Gobierno, sino buscar qué se puede hacer "por humanidad", por "defensa de la democracia" y por "garantía de los derechos humanos".
Así, ha desgranado que ese debería ser el "objetivo prioritario" y por eso, desde Podemos, están proponiendo medidas de presión diplomática como las que hizo la comunidad internacional a Rusia tras su invasión a Ucrania, como sanciones económicas para los "responsables políticos de este genocidio", citando a Netanyahu, al ministro de Defensa israelí, Yoav Galant, y quienes están tomando esas decisiones de dejar a los palestinos sin agua y sin luz", ha enfatizado.
"Cuando estamos ante una violación abierta del derecho internacional humanitario, cuando estamos hablando de crímenes de guerra, esto no es un problema de competencias en el Gobierno de coalición, es qué podemos hacer para actuar con contundencia y para resolver el problema", ha enfatizado.
Luego, ha señalado que dentro del ejecutivo hay carteras asignadas a cada socio pero que las cuestiones de "relevancia", tanto de Exteriores en manos del PSOE como las de Igualdad o Trabajo, que ostenta Podemos, "deberían ser pactadas" en el conjunto de la coalición respetando que "hay una fuerza mayoritaria y otra minoritaria", dado que para eso les votó la ciudadanía y gobiernan juntos.
Cuestionada sobre si lograr un pacto en política exterior es una línea rojo de su formación para la próxima investidura, Montero ha respondido que no hace falta plantear las cosas como una "amenaza" para que se cumpla la "voluntad popular" emanada del 23J, que dijo con "rotundidad" que desea un nuevo Ejecutivo de coalición.
"Me parece que es mucho mejor establecer una cultura en la que no hace falta amenazar al otro para que se cumplan las voluntades que la ciudadanía expresa con mucha contundencia. Si gobernamos juntos, decidimos juntos y decidimos juntos las competencias de la fuerza minoritaria y las competencias de la fuerza mayoritaria", ha reflexionado.
En este sentido, ha reafirmado que plantear medidas como pedir que el Gobierno lleve a Netanyahu a la Corte Penal Internacional, como defiende Podemos, no es un "problema de competencias" en el ejecutivo sino de tener "valentía" ante un "abierta violación del derecho internacional" y "crímenes de guerra" en Gaza por parte de Israel, que tiene además el respaldo de una "gran potencia" como Estados Unidos.
En consecuencia, ha proclamado que España tiene ahora la oportunidad, con su presidencia de turno del Consejo de la UE, de ejercer una "posición de liderazgo" ante la comunidad internacional y exponer, pese a que Israel es una nación "muy poderosa" que no se puede ser "cómplices" del "genocidio planificado" que están llevando a cabo en Gaza.
