VALÈNCIA. Patada adelante. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ofreció este martes a la Comunitat Valenciana dos medidas que le permiten aumentar el gasto público y aliviar la carga de la deuda, pero no solucionan su principal reivindicación, la mejora de la financiación autonómica, que el líder del PSOE ya dijo que no pensaba solucionar esta legislatura. Los dos anuncios los hizo en su comparecencia en el Congreso de los Diputados para explicar su programa de gobierno.
La primera medida, de carácter general para todas las Comunidades Autónomas, es la elevación hasta el 0,3 % del PIB del límite de déficit para las CCAA en 2019, dos décimas más de lo previsto, lo que representará 2.400 millones de euros adicionales. Para la Comunitat Valenciana, significará unos 220 millones de euros más de gasto autorizado respecto al que habría tenido con el límite del 0,1 % del PIB.
La nueva senda será aprobada este jueves por el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y el viernes por el Consejo de Ministros. La Unión Europea ha autorizado cinco décimas más de déficit para el conjunto de España en 2019, el 1,8 % del PIB frente al 1,3 % previsto, de los que el Gobierno he decidido ceder dos décimas a las CCAA.
Sin embargo, desde el punto de vista de la financiación autonómica ese aumento de gasto no resuelve nada, sino que agrava el problema de la deuda, ya que esos 220 millones adicionales se cubrirán previsiblemente con el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), dado que es improbable que la Comunitat Valenciana esté en condiciones de emitir deuda antes de finalizar 2019.
La segunda medida anunciada por Sánchez es la reestructuración de la deuda de las CCAA que no pueden salir a financiarse a los mercados por su elevado nivel de endeudamiento, con el fin de "adecuar los plazos de vencimiento al perfil de cada Comunidad Autónoma". El caso valenciano es especialmente grave, ya que la deuda supera los 45.000 millones de euros, el 41,4 % del PIB regional.
En respuesta al diputado de Compromís Joan Baldoví, Sánchez avanzó que en el caso de autonomías, como la valenciana, con un volumen grande de endeudamiento y que no aconseja su salida a los mercados, se abrirá un proceso de reestructuración, del que no dio detalles.
El procedimiento para la salida a los mercados financieros de las CCAA marca que las autonomías que quieran acogerse a este procedimiento deberán presentar un plan plurianual de endeudamiento que cubra el periodo comprendido entre el tercer trimestre de 2018 y diciembre de 2021, y que deberá elevarse a los ministerios de Hacienda y de Economía y Empresa.
De este modo, las comunidades adheridas al compartimento Facilidad Financiera que deseen salir a los mercados a partir del inicio del año 2019 y siguientes presentarán antes del 30 de noviembre del año anterior al Ministerio de Hacienda el plan plurianual de endeudamiento que cubra un período de tres años naturales sucesivos.
El aumento de gasto y la reestructuración de la deuda supondrían aplazar aún más la solución al problema de financiación autonómica, haciendo pagar a futuras generaciones parte del actual gasto corriente.
El portavoz del PDeCAT en el Congreso, Carles Campuzano, reaccionó a la oferta de Sánchez con el anuncio de que su formación no apoyará los nuevos objetivos de déficit si no se acompaña de una mayor financiación autonómica.
"Estas dos décimas de margen, siendo bienvenidas, son insuficientes", afirmó Campuzano en su turno de réplica. "No nos van a encontrar", dijo, en el apoyo a esta nueva senda de déficit si no se acompaña de un nuevo modelo de financiación autonómica, ya que, añadió "se ha incumplido" el actual, lo que "limita los servicios públicos en Cataluña".