La vida te sitúa o resitúa según las circunstancias que surgen. Unos son/eran gente principal y otros no tanto, aunque creyeran lo contrario. Unos abdican, a otros los retiran o destronan e incluso algunos reviven y otros quieren revivir. Y a la hora del homenaje, balance o regreso reclaman para sí honores que a lo mejor no les corresponden.
Vamos a ir por partes o personajes para desentrañar el acertijo. Sin ánimo de pontificar o de sentenciar a nadie. Cuando hablamos o analizamos asuntos de política tengo la sensación de que no es lo mismo que valorar las circunstancias de un ciudadano de a pie. Pero al final, digamos que todos, principales y no tanto, deberían ajustarse o adaptarse a la ley de vida.
Abdicación. Asunto no resuelto. Hemos dicho en muchas ocasiones que la abdicación del Rey Juan Carlos en su hijo el hoy Rey Felipe VI fue un modelo y ejemplo para la ciudadanía y los políticos. Pues parece que no es así. Al menos hay algo que chirría. La liebre ha saltado esta semana a cuenta del acto en el Congreso de celebración del 40 aniversario de las elecciones democráticas. Estaban todos, políticos constituyentes y de ahora, funcionarios de antes y actuales, periodistas de la transición que siguen a pie de obra y los nuevos…y no estaba Él. El Rey Juan Carlos I ni fue invitado. Y lo sorprendente ha sido la rapidez con la que sus acólitos, que aún conserva, enseguida se apresuraron a filtrar a la canallesca, su malestar, dolor e irritación por no haber sido invitado. Esta pataleta institucional y monárquica, al menos a mí me ha descolocado. Cuando se produjo la sucesión/abdicación fue el propio Juan Carlos quién aseguró que el Rey Felipe necesitaba su espacio y no debían coincidir en actos importantes para no robarle protagonismo. Los Constitucionalistas sentencían: “Rey solo hay uno como marca la Constitución”. Lo que me lleva a deducir que no se ha resuelto bien el asunto. Estamos a tiempo de de una ley orgánica que corrija y clarifique el status del anterior monarca. En otras monarquías el asunto se ha resuelto sin ninguna incomodidad, ni protocolaria, ni familiar, ni política ni periodística.
Matar al padre. Es una figura metafórica que fue utilizada por el padre del psicoanálisis, Sigmund Freud, para describir el momento en el que las personas maduran y dejan a los padres apartados para asumir nuevas responsabilidades. El proceso puede ser doloroso y difícil de asumir como parece ser el caso que nos ocupa. No es que Felipe quiera “matar” a Juan Carlos, es que es su tiempo. Quizás la decisión del actual monarca de desligarse de los últimos tiempos de su padre y de marcar un perfil propio más despersonalizado haya provocado este desajuste. Es innecesario. A estas alturas deberíamos estar valorando su discurso, a mi modo de ver importante, aunque algo cauto, con circunloquios, aséptico y con poca empatía. Le falta calor y vida en la calle. La sensación es que ha sido demasiado ajustado, pulcro e insuficiente. Ya sabemos que no es campechano. Por el contrario sí que ha sido valorado positivamente el mensaje de la Presidenta de la Cámara, Ana Pastor.
No saber irse a tiempo. Es una virtud que muy pocos ejercen y que en muchas circunstancias pocos se atreven a poner en práctica. El Rey Juan Carlos se tuvo que ir apremiado por su falta de arraigo y popularidad entre los ciudadanos. Sus últimas andanzas hicieron daño a la institución, la Jefatura del Estado y el recambio se hizo necesario. Esto no quiere decir que su labor primigenia no sea valorada y reconocida. Es de justicia resaltarlo. Y él lo sabe. Por eso ha tirado de su cohorte para hacer valer su trayectoria y de paso tirar a alguien de la oreja.
Dimes y diretes palaciegos, políticos y papanatismo periodístico. A propósito del sucedido, nuestros inconmensurables políticos han entrado al trapo con sesudos análisis. Tan sesudos como inconsistentes, que sí la Reina Letizia está detrás de lo ocurrido, que si el padre y el hijo no se llevan,...en fin, bobadas. Y curiosa la reacción de los partidos. PP pidiendo a la presidencia del Congreso que repase el protocolo para que no vuelva a ocurrir, Pablo Iglesias diciendo que estaba justificada su presencia y para colmo del esperpento, PSOE y C´s muy cautos y discretos y casi de perfil. Por no decir el papel de los medios, no todos. Alguno incluso ha montado un “2 de Mayo” con el asunto, queriendo ser más Juancarlista que ninguno o más monárquico que nadie, o ¿estaban de manera interpuesta atizando a la Jefatura del Estado? En fin, un despropósito. La solución puede ser sencilla. Dótese al Rey Emérito (a él no le gusta el término) de la figura institucional que corresponda sin que menoscabe su posición y trayectoria.
El síndrome del Príncipe destronado y el primo de zumosol. Y como mi artículo iba de Reyes y Príncipes aquí va la comparativa con el PP de la Comunidad Valenciana, o para ser más exactos del partido en la provincia de Valencia. ¡Que nadie se me revolucione! En psicología se habla del “príncipe destronado” cuando la estructura familiar evoluciona y los celos se apoderan del que detentaba la posición dominante porque aparece un miembro más en la familia o porque vuelve el hijo pródigo y lógicamente hay que darle acomodo. En fin, la vida misma. Convendrán conmigo que al final de la batalla lo importante son los votos en las elecciones y en algunos casos mantener el puesto en la lista pasa a ser lo más deseado, por eso algunos recurren a su “primo de zumosol” en Génova. Buscan al hermano protector que todos queremos tener.
En el PPV gobierna ya una gestora con el diputado, Rubén Moreno, al frente de un equipo equilibrado y lo digo por los reunidos (Catalá, Clemente, Giner y Garrigues). Madrid y la regional del partido han tenido que tomar cartas en el asunto. No podían envenenarse más. Aquí ha habido un destronamiento por torpeza propia, en toda regla del hasta ahora Presidente provincial, Vicente Betoret. Los errores han sido de libro, empecinamiento, falta de trabajo, demasiada pro-actividad de la que no toca,-enrede permanente-, que a algunos ha cansado. Que se lo pregunten al Coordinador general del partido, Fernando Martínez Maíllo. Lo de recurrir al “primo de…” Al final se vuelve en contra. Todos y digo todos, dirigentes regionales, provinciales y por supuesto nacionales deberían calibrar el futuro. Necesitan votos y muchos si quieren volver a las instituciones, y también sentido común. En una palabra trellat.
Con la vuelta de Pedro Sánchez al Tablero, al menos esta semana ha habido movimiento. Carrusel de encuentros, contra-programación incluida de Rajoy, y posicionamientos a futuro. Parece que no habrá moción de censura en el corto plazo y que el acuerdo sobre el techo de gasto y los presupuestos de 2018, aunque trabajado y presionado por Ciudadanos, saldrán adelante. Eso si las cuentas judiciales con los asuntos de corrupción de los populares pasarán factura si es que no cambian el status quo actual.
El Rey Felipe VI: “Fuera de la ley solo hay arbitrariedad, inseguridad y, en último extremo, la negación misma de la libertad” ¡Posicionamiento claro ante el desafío soberanista de Cataluña!
El Rey Juan Carlos I: “Han excluido a quien condujo el camión de la Transición. Hasta han invitado a las nietas de La Pasionaria” ¡Error de bulto y pataleo institucional mal resuelto!
Cristóbal Montoro, Ministro de Hacienda cercado por las informaciones sobre su bufete: “Estoy esperando a que alguien cruce la raya para tomar medidas” ¡Amenazando con la querella!
Pedro Sánchez, secretario general PSOE: “Yo no soy un rojo peligroso. Soy un político libre” ¡Buscando su identidad!
Luis Bárcenas, ex tesorero del PP y multi-imputado: “El PP no tiene nada que ver en Gürtel” ¡Viniendo del personaje, en el PP deberían echarse a temblar!
Irene Montero, portavoz de Podemos tras la declaración de Bárcenas en el Congreso: “El gallo se ha dejado todo en la garganta” ¡Dejando caer lo del pacto entre populares y el ex tesorero!
Fernando Martínez Maíllo, Coordinador General PP: “Se acabó la campaña electoral en Valencia y si alguien sigue, tomaremos medidas” ¡Aviso a navegantes!
Isabel Bonig, Presidenta PPCV: “Quien no trabaje no tiene cabida en este proyecto. No es el momento de ponerse de perfil” ¡A buen entendedor sobran palabras!
Ximo Puig, Presidente de la Generalitat, balance a mitad de legislatura: “El Acord del Botànic no hace milagros, pero todos juntos estamos consiguiendo que se solucionen los problemas profundos” ¡Necesidad de vender éxitos ante la debilidad propia!
Mónica Oltra, Vicepresidenta del Consell a cuenta de la posición del PSPV-PSOE sobre negociación del techo de gasto : “Los tiempos de las mayorías absolutas y del despotismo se han acabado. Ni Ferraz, ni Blanqueries, ni la plaza del Pilar pueden imponer nada” ¡Difícil convivencia en el Botànic con las primarias del PSPV!
Joan Ribó, Alcalde de València: “Las fallas buscan hacer reír, eso es lo que quise decir al calificarlas de grotescas” ¡Sostenella y no enmendalla!