VALÈNCIA. La compañía española de movilidad Cabify ha anunciado que seguirá operando en València y Alicante tras adaptar su modelo de negocio en la Comunitat Valenciana a los requisitos introducidos por la normativa en materia de arrendamiento de vehículos con conductor que la Generalitat aprobó el pasado 29 de marzo y que establece una precontratación de 15 minutos.
Esta decisión difiere de la adoptada este mismo jueves por Uber que ha decidido abandonar la ciudad por las restricciones que introduce la normativa del Consell y que entran en vigor el próximo sábado 1 de junio.
No obstante, Cabify apuesta por ofrecer "una respuesta de calidad a los más de 300.000 usuarios que han confiado en su servicio en Valencia y Alicante", aunque recimina a la administración valenciana las "restricciones impuestas a su actividad, que en nada benefician ni a la ciudadanía ni a los usuarios", asegura la compañía en un comunicado.
Cabify prestará en la Comunitat Valenciana, a través de su filial Miurchi Car SL., el servicio de transporte -y no el de agencia de viajes, que es el que venía utilizando hasta ahora en todas las ciudades salvo Barcelona- y operará tal y como lo hacen las empresas de transporte contratadas por hoteles y otros servicios similares del sector VTC tradicional.
Por tanto, desde este sábado 1 de junio, los usuarios que deseen viajar con la aplicación tanto en València como en Alicante habrán de contratar expresamente el servicio de transporte ofrecido por Miurchi Car, S.L.,aceptando para ello unos nuevos términos y condiciones en la aplicación. Con este servicio, la contratación tendrá lugar la primera vez que un usuario pide un coche de VTC y acepta los nuevos términos y condiciones en la aplicación, momento en el tendrá que hacerlo con la nueva antelación de quince minutos. partir de entonces ya no tendrá que esperar ese tiempo, dado que se estima que se trata de un servicio ya contratado del que se piden nuevos recorridos.
La compañía subraya que esta decisión "no implica la conformidad con esta regulación altamente perjudicial para la movilidad y para la libertad de elección de los usuarios", sino que "responde al compromiso de Cabify con la ciudad, sus usuarios, sus empleados, colaboradores conductores y con toda su red de empresas asociadas que también trabajan en favor del desarrollo de la economía digital y la movilidad sostenible tanto en la Comunitat Valenciana como en el resto de España".
El presidente de Cabify Europa, Mariano Silveyra, afirma en el comunicado que espera que los usuarios "entiendan y respalden" esta adaptación de su modelo de negocio y que sigan viajando con su aplicación y, "al hacerlo, reivindiquen su derecho a elegir entre distintas alternativas de movilidad".
La adopción del nuevo modelo de Cabify "se asienta en el convencimiento de que la situación será transitoria, y de que el Decreto ley aprobado por la Generalitat será declarado inconstitucional y revocado por los tribunales en un futuro próximo".
