Antonio Catalán: "Tendría que haber una ministra sólo de Turismo y quitar competencias a las CCAA"

BENIDORM. El hotelero Antonio Catalán acudió este jueves 7 de junio a las V Jornadas de Turismo celebradas en Benidorm bajo la organización de AVE, Aefa, la Cámara de Alicante, EDEM y Hosbec. Fue a hablar de su experiencia en el Camino de Santiago, centrándose en sus momentos de ocio y fuera de su faceta como empresario, fundador de NH Hoteles y creador de AC Hotels by Marriott, con hoteles en todos los continentes.

- ¿De dónde viene su interés cada año por hacer el Camino de Santiago?

Todo viene cuando yo tenía 25 años, que fui con otro amigo. Entonces no había Camino de Santiago como se conoce ahora. Hicimos más de 1.000 kilómetros. Cuando pasó lo de mi hija, que mi mujer echando marcha atrás la atropelló con dos años (salió adelante), pero hice la promesa de ir. Fuimos cinco amigos el primer año y después se fue juntando gente. Y este año irá como 105 personas, no todos con bicicleta, que serán como 70. Yo he viso como ha crecido el Camino. No es que sea una experiencia religiosa, para algunos lo es, para otros es deportiva, para otros es el reto llegar... 

- Ha venido a una jornadas de turismo y gracias a su empresa es sabedor de las tendencias en los últimos años...

Los hoteles en general son muy estables, casi desde que nací yo: una habitación, un baño, el comedor, cambiaron las tendencias de comer y de funcionar, pero lo que mas ha cambiado ha sido la comercialización. Nosotros somos un grupo que tenemos hoteles en todo mundo, como grupo Marriott. Tenemos 120 millones de tarjetas de fidelización, con lo cual el tema es por dónde te entran los clientes, ¿no? Hay muchas plataformas como Booking, que son de alguna manera los directores comerciales de muchos hoteles. 

- ¿Y eso es positivo para el hotelero?

Yo creo que sí. La tecnología siempre es positiva. Lo es más para el que la tiene, que para el que la consume en general. Yo entiendo que la gente joven sabe escribir, leer, pero siempre están con el ordenador en la mano con lo cual cambia el tema. Lo que ha cambiado es la forma de comercializar. Lo que se necesita es mayor concentración. La única forma de hacer pulso a esta gente es con volumen. Nosotros hemos estado sin Booking año y medio y no pasó nada. Al final han aceptado las condiciones que les hemos puesto nosotros. 

- Con estas nuevas tecnologías hay un auge de los apartamentos no reglados y muchos lo ven como competencia de los hoteles...

El cliente de apartamentos es diferente al de hoteles. Yo creo que los apartamentos están teniendo problemas y tendrán más todavía porque hay una figura clara que es el aparthotel. Mis hijas que van invitadas a cualquier hotel, me han dicho que se van a Oporto y han cogido un apartamento. Me parece bien. 

- ¿Si?

Yo diría que hay una tema fundamental de seguridad, sobre todo en los momentos que vivimos, porque tú entras a un hotel y vas con el DNI en la boca, mientras que en un apartamento lo alquilas y vas con 15 amigas. Y hay otro tema en los apartamentos sueltos que se llama economía colaborativa, que ha sido todo lo contrario: lo que ha hecho ha sido subir más el precio del alquiler porque la gente coge los pisos y los alquila para turismo. Yo creo que los apartamentos reglados y no reglados no van a ir a más, sino que irán a menos, es mi impresión. Y bueno es que esto ya está reglado para que sea un aparthotel, más que ser un apartamento de una forma rara.

- Otra de las polémicas que hay en torno a los empresarios hoteleros está en las condiciones de trabajo de las camareras de piso, que se han organizado incluso en las llamadas Kellys en lugares como Benidorm. ¿Qué opina?

Más vale que no sepan que estoy aquí porque yo siempre con las kellys… (ríe) Hay un tema claro que yo creo que con el gobierno esto va a cambiar. Es un tema tan simple como no poder descolgarse del convenio. Con lo cual, con la ley en la mano hoy puedes despedir a las camareras de piso que están cobrando 1.200 euros y ponerlas en una empresa como trabajador externalizado, que en general son una banda de piratas casi todos para que estén ganando 700 euros. Pero no tiene sentido, es negativo no sólo desde el punto de vista social, sino desde el económico porque hay que tener a la gente bien motivada y pagada.

- Usted es votante declarado del PSOE, ¿Qué opinión le merece la nueva ministra de Turismo?

Estoy encantado de que haya salido el PP y esté el PSOE. La ministra de Turismo no la conozco, pero ya vi en la tele que entre las prioridades que tenía, ninguna estaba relacionada con el turismo. Industria y Turismo son dos cosas diferentes, yo creo que este país se merecería tener un ministro de Turismo por un lado y por otra parte sería un contrasentido porque las competencias de Turismo están transferidas a las comunidades autónomas. 

- ¿Entonces?

Estaría bien con estructuras diferentes y sería bueno por ejemplo, en casos como el del Camino de Santiago ¿qué tal funciona la interrelación entre las comunidades por las que pasa? Fatal, porque hay cinco. Lo único que hace la ministra de Turismo es contar cuántos turistas han venido este año y no se preocupan de nada. Ademas está la secretaria de turismo y mucha otra gente que no sé lo que hacen aún. Y yo estoy en el Consejo de Turismo que no sé ni cómo no me han echado, sobre todo los del PP porque cada vez que dicen algo, levanto la mano y digo: "A ver y esto por qué, y el presupuesto por qué". Yo creo que sería bueno que se quitaran ciertas competencias a las comunidades autónomas y que hubiera una regulación para todos igual. Después, la promoción por separado me parece bien. Lo que pasa que cuando una comunidad autónoma tiene poder sobre algo, es muy difícil que ceda. 

- ¿Cómo ve la Comunitat Valenciana?

Desde que está Ximo Puig... es un magnifico presidente que ha sabido armar todo este tinglado con todas las fuerzas políticas que tiene. Es una comunidad en alza que está creciendo muy mal financiada, y sobre todo en las épocas anteriores y con un deficit que como dijo Pedro Sánchez no sabemos de dónde va a sacar el dinero, pero va a arreglar todas las deudas que tengan las comunidades autónomas.