VALÈNCIA (EP). La portavoz de Unides Podem en Les Corts, Naiara Davó, cree que el modelo del Botànic es "perfectamente exportable" a España y lamenta que "Pedro Sánchez no quisiera mirar a la Comunitat Valenciana", por las negociaciones fallidas entre Podemos y el presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE.
"El PSPV tendría que abrir los ojos al PSOE de Madrid y poner sobre la mesa que un gobierno con diferentes fuerzas del cambio puede funcionar", defiende en una entrevista a Europa Press, a un mes de las elecciones generales del 10 de noviembre.
Davó sostiene que "esa es la solución y el cambio que debería hacer el PSOE", seguir el ejemplo del gobierno del Botànic II entre PSPV, Compromís y Unides Podem. "Estamos demostrando que un gobierno de coalición sí es capaz de marcar el rumbo de las políticas públicas", recalca.
Bajo este prisma, llama a que la Comunitat "empiece a creerse que es y puede ser un actor relevante para el resto de España". "Siempre hemos vivido con subalternidad cuando estaba el PP en Madrid", lamenta, y advierte de que la situación se puede repetir si hay un cambio de gobierno tras el 10N.
Para la síndica 'morada', "un acuerdo del PP, Ciudadanos y Vox sería perjudicial para la Comunitat Valenciana y para toda España", tras "los destrozos que están haciendo donde gobiernan, como en Andalucía o Madrid, al cuestionar los derechos más básicos".
A pesar de ello, considera que "Sánchez ha renunciado completamente a llevar el Botànic a España", ya desde la primera investidura fallida de julio, lo que ve como un ejemplo de "cuando el PSOE quiere pactar y cuando no". Recuerda, por contra, las negociaciones a tres bandas PSPV-Compromís y Podem tras el 28A, "desde el día siguiente, sin vetos y sin pedir la abstención".
Pero "lo más preocupante", a su juicio, se plasmó en el mitin que dio Sánchez la semana pasada en València, donde "renunció a cambiar el modelo de financiación autonómica" al comprometerse a abordarlo durante los próximos cuatro años y "hizo un discurso muy parecido al del PP: una España vacía, solo de palabra, que no garantiza los derechos de los ciudadanos".
En este contexto, Davó espera que el 'president' de la Generalitat y líder del PSPV, Ximo Puig, se mantenga "muy firme" ante Sánchez en la reivindicación de la financiación. Aunque entiende que "es su partido", recuerda que "es el presidente de todos los valencianos" y debe seguir la misma línea "gobierne quien gobierne".
Respecto a si ve "dos PSOEs" en Madrid y la Comunitat o si Puig ha bajado el tono desde que gobierna Sánchez, achaca su posición a las dos campañas electorales de 2019: "El Botànic ha continuado pidiendo esas reformas; ha sido el Gobierno central, aunque en funciones, el que nos ha toreado y ha dicho 'donde dije digo, digo Diego'".
Frente a estas "excusas", exige al PSOE que "si de verdad tiene voluntad política, sea capaz de buscar los mecanismos" para compensar la infrafinanciación valenciana. "Ahí hemos visto la diferencia entre Madrid y Valencia", subraya.
Eso sí, para la portavoz de Podem, la situación no debería complicar la relación entre los socios del Botànic, "un gobierno fuerte donde caben las discrepancias y hay pluralidad". "Todos tenemos muy claro lo que hemos venido a hacer", recalca, y reivindica que "a España le iría muy bien si mirara a la Comunitat: Sánchez lo tenía tan fácil como darse cuenta de que está funcionando".
Por otro lado, sobre la decisión de Compromís de confluir el 10N con la plataforma de Íñigo Errejón en Más País, remarca que aunque "parece que entra un actor más, no es realmente un nuevo actor". Davó hace hincapié en que no es más que "Compromís en coalición con un partido regional de Madrid" y que, por tanto, "al final es como en las pasadas elecciones".
Y lamenta que no quisieran volver a concurrir juntos aunque "los resultados demostraron que sí funcionaba esa alianza" en 2015 (És el Moment) y 2016 (A la Valenciana). "Es legítimo; es cierto que Mónica Oltra --coportavoz de la coalición-- se mostró muy predispuesta, pero la Ejecutiva tomó otra decisión", argumenta, y apunta que "no suele pasar" que un partido que baja de unos comicios a otros no quiera sumar.
En cualquier caso, los votantes de izquierda no tendrán, a su juicio, "ninguna duda" de a quién votar, pues "Compromís tiene su papeleta y Podem la suya". Defiende que la "diferencia" está en el proyecto de país que tiene su partido para "toda España, con propuestas diferenciadas para cada territorio".
Podem mira al 10N "con fuerza" y "relativa tranquilidad" tras los resultados de las dos últimas elecciones, aunque mantiene la "prudencia". "La ciudadanía ha demostrado su confianza con nuestro proyecto", remacha la portavoz 'morada'.