LA CASA BARDÍN ACOGE LA EXPOSICIÓN 'MI' DE LOLA LORENTE

De Bigastro a Angulema: Lola Lorente, en la meca del cómic europeo

26/11/2018 - 

ALICANTE. Casa Bardín, sede del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, inaugura la exposición MI de Lola Lorente el martes 27 de noviembre, a las 19 horas, comisariada por Gertrud Gómez y enmarcada en el II Concurso Arte. Hasta el 15 de enero se podrá visitar esta muestra de la artista de Bigastro, que hace un recorrido completo por toda su trayectoria artística, permitiendo que nos acerquemos a su mundo interior, sensible y ambiguo, el cual deja ver a través de sus ilustraciones, estampas, esculturas y páginas de cómic. Nació hace 38 años en la localidad del Bajo Segura y las vivencias durante su infancia y adolescencia en este pequeño universo son una fuente importante de inspiración que la acompañaran hasta la actualidad. Pero la exposición inicia su recorrido a partir de la época del “Fanzine Enfermo” creado entre 2003-2007, experiencia que ella denomina como su verdadera escuela. 

Participa en revistas nacionales especializadas en cómic como Humo o Nosotros somos los muertos, donde comienza a desarrollar su lenguaje gráfico blanco y negro, rico y minucioso, en páginas de composición elaboradas, hasta llegar a su primera novela gráfica, Sangre de mi Sangre (Astiberri, 2011) publicada en Italia y Francia, galardonada con el premio Autor Revelación 2012 en el Festival Internacional del Cómic de Barcelona. Una obra que explora en cada página la migración de la niñez a la adolescencia, con una mezcla desasosegante de ternura y crueldad. Por otro lado, en las páginas de La alumna, su próxima novela gráfica que verá la luz a principios de 2019, se narra un viaje de vuelta al pasado donde Mary Pain, una joven mujer de personalidad particular, intenta encontrar su sitio bajo un escenario de fondo en crisis social y familiar. Su exposición MI está comisariada por Gertrud Gómez, licenciada en Conservación y Restauración de Arte por la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Madrid, conocida activista cultural alicantina a través de su galería de arte, Santamaca, y asesora para Casa Mediterráneo en Arte y Cultura.

-De Bigastro a València, de València a Barcelona, de Barcelona a Angoulême. ¿Cómo se transita desde el corazón de la Vega Baja del Segura a la meca del cómic europeo?
-Recuerdo a mi profesor de dibujo artÍstico en el instituto, sus clases eran el mejor momento de la semana. Decidi despues, hacer los estudios universitarios de Bellas Artes en la Politécnica de Valencia. Alli no habia ningun tipo de materia relacionada con el cómic, la formación en general era bastante académica. En mi cuarto año de estudios aparecieron estudiantes que venían de la Universidad de Pontevedra y que ya desarrollaban su práctica del dibujo de una forma mucho más abierta y creativa. Gracias a ellos, descubrí el mundo de la ilustración y del cómic. Pasábamos el tiempo en librerías especializadas, en aquel entonces internet no era lo que es ahora, y nos sentimos motivados para crear el Fanzine Enfermo, dirigido por Félix Díaz y Alberto Vázquez. Este fue un período de mucha riqueza creativa, de mucha producción. En esa época empezaba a desarrollar mis primeras historietas de cómic y rápidamente me propusieron participar en numerosas revistas especializadas en cómic de tirada nacional. Continué mis estudios de ilustración en La Escola Massana de Barcelona, al mismo tiempo que seguíamos con el fanzine y con alguna otra historia corta para revistas como NSLM, Inrevés, sins entido y Humo de Astiberri. Llegó progresivamente la intención de crear una historia más larga, una novela gráfica; Sangre de mi Sangre y fue con este proyecto que vine a hacer mi primera residencia en Angoulême, a la Maison des Auteurs. Fue un año de vital importancia para conocerme a mi misma como autora y dedicarme plenamente a la elaboración de un proyecto de esta envergadura. De vuelta en España y sin muchos recursos ni apoyos para trabajar en mi segundo proyecto, obtuve una beca del Centro Nacional del Libro en Francia para venir de nuevo a la Maison des Auteurs y desarrollar mi siguiente proyecto. Desde entonces continúo viviendo aquí.

-¿Cuales son tus referentes gráficos? ¿De qué influencias te sientes más cercana? ¿Hasta qué punto han guiado tu estilo?
-En cuanto a mis referentes gráficos puedo decir que han ido evolucionando a lo largo del tiempo. En un principio, podría citar entre otros a Charles Burns, Blanquet, Max Anderson, Anke Feutchtenberger, Debbie Dressler, Ludovic Debeurme, Jason, Robert Crumb y un largo etcétera que comprendería a autores con una fuerte identidad gráfica. Yo hasta entonces había sido una lectora muy poco habitual de cómics y mi acercamiento a estos sin duda fue determinado por su lenguaje gráfico, por su fuerte universo personal. Los referentes han ido cambiando con el paso del tiempo, cada vez me siento más interesada por otros medios como la fotografía, el cine y el teatro y la danza. Estos medios me inspiran a descubrir nuevas formas de contar historias. En cuanto al estilo, siempre en evolución, lo que me preocupa es cómo encontrar la forma de poder transmitir la emoción que necesito en cada momento. En La Alumna, mi próximo cómic, el estilo se ha vuelto mas intuitivo, realista y vibrante  lo cual me permite encarnar así a Mary Pain, la protagonista de la historia, en una realidad más próxima y sensible.

-Sangre de mi sangre te supuso el premio a autora revelación del Saló del còmic de Barcelona, pero parece que tu exilio francés es definitivo. A pesar de que es una batalla internacional, ¿es más fácil ser “autora” de cómic en Francia que en España?
-Mi primer cómic, Sangre de mi sangre fue editado en Francia y en España al mismo tiempo, y posteriormente en Italia. Este segundo será publicado, al mismo tiempo, en estos mismos tres países. Francia es un país mucho más difícil y complicado para hacerse un hueco. La industria del cómic es incomparable a la española, poseen un ritmo de producción de títulos tan enorme que quizás el tiempo que se le puede dar a un libro en librerías sea de 2 semanas, algo casi dramático, la competencia es brutal. Por otra parte, existen numerosas becas del Centro Nacional del Libro, que apoyan a autores para la realización de cómics. Ojalá esta iniciativa llegase a España, el autor podría vivir a veces un poquito más tranquilo. El apoyo que se le da a la cultura en Francia sigue siendo muy superior comparado con el de España. Sin embargo,  España está viviendo un momento muy especial en promoción y creación de cómics, hay una muy fuerte cantera de jóvenes autores que tienen mucho por decir.Por otra parte, no siento que mi exilio francés sea definitivo, no me gusta creer en las fronteras.

-MI es tu primera exposición en casa. ¿En qué momento de tu carrera llega este reconocimiento?
-Cuando editamos Sangre de mi sangre hice un encuentro en Bigastro, mi pueblo. Fue un momento entrañable, mucha gente vino y les pude explicar en qué consistía ser autora de cómics, es una profesión bastante "rara", con ningún ejemplo hasta entonces en el pueblo. Aunque he expuesto en otras ciudades españolas y francesas, es la primera vez que expongo en Alicante, donde podré mostrar otras facetas diferentes a la del cómic. Esta posibilidad llega en un momento en el que mi segundo libro está a punto de ser acabado, con la fatiga que eso implica. Estoy muy agradecida de tener la oportunidad de poder reunir a amigos y familiares y a todo aquel que quiera venir y entrar en el universo que recreo. El visitante encontrará numerosas páginas de mis dos historias de cómic, así como ilustraciones, serigrafías y algunas piezas de esculturas que realizo de una forma más libre, como evasión de la enorme concentración que exige la elaboración de una novela gráfica.

-La alumna, el álbum previsto para 2019, ¿saldrá primero en Francia que aquí? 
-Saldrá al mismo tiempo, ya queda poquito. Terminar un álbum es un momento bastante delicado,  la historia queda perfilada y se convierte en definitiva.

 

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