ELCHE. El alcalde Carlos González ha tenido un desayuno informativo con los medios de comunicación ilicitanos para hacer balance del curso pasado, 2017, y sobre todo, plantear los próximos retos que tendrá que abordar la ciudad en el actual y nuevo año, consciente de la importancia de consolidar algunos proyectos y llegar a otros nuevos. El de 2018 será el último año presupuestado entero por el tripartito —a expensas de lo que pase en 2019—, un curso que el primer edil espera que siga con “estabilidad, cohesión y transparencia”. De esos principales retos para los próximos doce meses, destacan, entre otros, la ampliación de suelo de Elche Parque Empresarial.
En ese sentido, ha destacado la creación del Parque Tecnológico, que empezará a construirse este año o la ampliación del Parque Empresarial, de más de 600.000 metros cuadrados. Al ser una actuación tan ambiciosa, los trámites de urbanismo son complejos y largos, por lo que esta ampliación, la más grande en los 25 años de vida de este parque, la tramitación ha sido declarada de urgencia para que el proceso tenga mayor celeridad. Es algo que está gestionando el Ayuntamiento junto a la Generalitat Valenciana, y el alcalde fija como objetivo que durante 2018, finalice la tramitación administrativa de la modificación que se está llevando a cabo para dicha ampliación.
Aproximadamente en febrero se producirá la aprobación por parte del pleno del instrumento urbanístico, que tiene naturaleza medioambiental y que ahora mismo se está gestionando. Pese a haber sido declarado de urgencia la tramitación, el alcalde advierte de que “conlleva una complejidad extraordinaria y se está gestionando con el ánimo de las dos administraciones de acelerar al máximo la tramitación”. Por lo tanto, parece que hasta 2019 no podría empezar a materializarse la ansiada ampliación, previo proceso de licitación de las obras.
Asimismo, y en referencia a urbanismo y el Hotel de Arenales, del que recientemente se ha conocido que Princesol, la empresa propietaria, va a pleitear contra el Gobierno central, González ha expresado su deseo de que la empresa ejecute el permiso de derribo que le fue concedido. Actualmente, la empresa cuenta con esa licencia de demolición —de seis meses— y expira en febrero, por lo que el alcalde espera que se derribe la parte antigua del inmueble, ya que está en primera línea de playa y da mala imagen, además de que puede ser peligroso por el deterioro del hotel.
Por esas razones se solicitó el derribo y González espera que se ejecute. Bastaría con que se iniciase el derribo en el plazo establecido. El primer edil espera que la empresa actúe en consonancia con la solicitud realizada, además de que la Conselleria de Trabajo le concedió el permiso especial porque hay amianto —cancerígeno— y no considera incompatible que a su vez la mercantil pleitee con el Ministerio de Medio Ambiente.
Por otra parte, en 2018 se llevará a cabo la primera fase de la obra para transformar el actual Museo de Arqueología e Historia de Elche (MAHE) en el Museo de Arte Ibérico y ha vuelto a ligar este proyecto a la posibilidad de la cesión temporal de la Dama de Elche, y ha recordado que el Ministerio abrió la puerta a esta cuando finalizase el 150 aniversario del Museo Arqueológico Nacional (MAN), “por lo tanto hay que pensar en una cesión a finales del 18 o principios del 19, por el momento el Ministerio no ha confirmado, sólo ha dado un marco temporal”. Una cesión que en los últimos tiempos ha quedado más difusa por las contradictorias respuestas emitidas desde la administración central. En cualquier caso, habrá una futura reunión con el Ministerio de Cultura para concretar acuerdos sobre el proyecto museístico y se seguirá trabajando con la administración autonómica para su regreso.
Respecto a otros proyectos, ha destacado que en 2018 se llevará a cabo la ejecución de la primera fase de la Estrategia DUSI, la revisión del Plan General, la Ordenanza de Protección Contra la Contaminación Acústica y se trabajará en la Agenda de Infraestructuras Estratégicas para Elche.
También ha tenido palabras el edil para el Elche CF y el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), al reseñar que esta institución ha hecho todo lo posible para recuperar el dinero público “invertido indebidamente allí” además de en otros equipos de fútbol. Y el segundo objetivo del mismo, era no sólo conseguir el primero, sino poner las condiciones para reflotar el club, “posibilitar la entrada de capital en el club para resolver la situación económica de fondo. Se intentó en 2017”. De este esfuerzo cree que se hicieron las cosas bien, “pero las dificultades generadas por el Consejo de Administración impidieron que saliera bien, pero la Generalitat hizo su parte correctamente y a finales de 2018 ha hecho un nuevo intento para conseguir la entrada de un nuevo inversor en el club”.
A este respecto, el alcalde opina que el IVF ha hecho lo correcto y lo que debe hacer, ya que se trata de dinero público, “para sacar a concurso el crédito, y está poniendo en marcha el procedimiento adecuado para conseguir esos dos objetivos”. Ante la circunstancia de que sólo ha habido una oferta, por parte del Consejo de Administración el mayor accionista, es decir, el expresidente José Sepulcre, hecho del que dice, “sé que hay muchas opiniones, pero están ejerciendo un derecho que tienen, que pueden ejercer y que nadie puede impedir que ejerzan. Ofertas hay las que hay y sobre eso es difícil actuar”. Y ha finalizado reflexionando que será ahora el IVF quien tenga que decidir si esa oferta cumple con los requisitos establecidos.
