ALICANTE. El sector turístico, que representa el 14% del PIB de la Comunitat (algo más en la provincia de Alicante) y que fue el primero en tener que cerrar con el decreto del estado de alarma para frenar la pandemia del coronavirus, es también uno de los que ve más lejana su recuperación. La patronal hotelera Hosbec, principal 'lobby' empresarial del sector, ya admite que el verano se presenta sombrío, y cuando se realizan previsiones con la premisa de la 'vuelta a la normalidad', nadie está muy seguro de que esa normalidad sea la que el sector daba por sentada hace solo unas semanas.
Ante el parón obligado, tanto Administración como instituciones y empresas privadas ponen el acento en la formación, con el objetivo de volver en mejores condiciones que antes para sumar valor añadido al producto turístico de la Comunitat. Una formación, además, que se ha adaptado al actual escenario para preparar la vuelta al trabajo no solo 'reciclados', sino con el coronavirus, sus consecuencias y la forma de hacerle frente en el horizonte.
Es el caso de la Escuela de Negocios Turísticos FORST, con sede en Benidorm, que tras la entrada en vigor del estado de alarma ha puesto en marcha distintas medidas encaminadas al mantenimiento de toda la docencia prevista para este curso y, "lo más importante, se han adaptado los contenidos para orientarlos al futuro y, sobre todo, a la reconstrucción de el sector, así como a trabajar otras habilidades en los alumnos que puedan mejorar su reincorporación al mercado laboral", según explica su director, Javier Jiménez.
Este experto en turismo señala que "el futuro se presenta complicado, y todos los cambios que se estaban fraguando se van a acelerar". Así, lo que hasta ahora eran tendencias a las que había que estar atento, como el teletrabajo, la robotización, la supresión de procedimientos o las medidas de seguridad sanitaria, ahora van a ser elemento obligado de la oferta antes de volver a encender el motor. "Todos estos cambios, que quizá estaban previstos en un horizonte de cinco años, sin embargo ahora se van a implementar en unos meses".
La formación para adaptarse a esos cambios es esencial. "Todas las personas que estén formadas y preparadas para estos cambios son las que mayores garantías tendrán de salir con éxito de esta situación", defiende Jiménez. El director de FORST considera que "es crucial en estos momentos formarse para volver reforzados a un sector que ahora mismo está parado. Estamos trabajando en preparar a los alumnos para que su incorporación al mercado, tanto a nivel formativo como a nivel emocional, sea lo mejor posible".
Las medidas adoptadas por la escuela desde mediados de marzo pueden resumirse en cinco grandes apartados, según explica su director. El primero, el salto definitivo al online. "Tanto en el Máster de Dirección de Hoteles como en el Programa Superior de Revenue, toda la docencia se adaptó a online durante la primera semana del estado de alarma. Se han partido las sesiones, que antes eran un día a la semana, a dos tardes a la semana de dos horas y media cada una".
El segundo apartado ha sido la ampliación y adaptación de los contenidos a la actual situación. Así, para los alumnos de máster se imparten charlas extraordinarias de temas más humanos, como gestionar el estrés y la ansiedad en esta situación o las perspectivas en el sector turístico tras el confinamiento. También, en tercer lugar, se trabajan las habilidades personales a través de actividades extraordinarias como ejercicios de autoconocimiento y reflexión, lectura de manuales sobre asertividad y liderazgo, o acciones dirigidas a fomentar el autoempleo.
El cuarto aspecto de la adaptación ha sido la puesta en marcha de actividades paralelas. "Todas las mañanas se conectan los alumnos y profesores para hacer ejercicio juntos o sesiones de meditación. Se mantiene la fast beer que tenían antes y que ahora se realiza de manera virtual". Y por último, la creación de comités por áreas temáticas: comités sorpresa "para generar el efecto wow en los alumnos; comité de ayuda para poner en marcha acciones para ayudar a la sociedad; o el comité de exalumnos "con el objetivo de impulsar alianzas que fomenten el empleo y la formación entre los alumnos de anteriores cursos de la escuela".