CASTELLÓN. Sociedad de Fomento Agrícola Castellonense, Facsa, una de las compañías propiedad del Grupo Gimeno, se ha hecho con el contrato para abastecer de agua durante los próximos 25 años al municipio ibicenco de Sant Antoni de Portmany. La noticia llega después de que la Mesa de Contratación del consistorio desestimase las alegaciones presentadas por la empresa Aqualia, una de las otras seis que optaban en el concurso abierto (entre ellas Acciona o la valenciana Global Omnium, propiedad del empresario castellonense Enrique Calabuig) y el acuerdo haya sido ratificado por el pleno municipal.
El nuevo contrato de Facsa tiene un valor de prácticamente 100 millones de euros (IVA excluido) y supone un nuevo impulso a su presencia en las Islas Baleares y expansión por el territorio estatal. De hecho, la compañía castellonense está implantada desde hace una década en Mallorca, pero no gozaba de ningún contrato de concesión en Ibiza.
Los méritos de Facsa para hacerse con el nuevo contrato han sido la presentación de la oferta que obtuvo una mayor puntuación en el aspecto técnico y la económicamente más ventajosa. Y es que la compañía radicada en Castellón ha ofrecido una garantía sensiblemente mayor a la de sus competidores. El nuevo contrato conlleva un canon inicial de 12 millones de euros e incluye además la inversión de 3,5 millones en un total de 15 proyectos, entre los que se incluye la ampliación de un depósito y la renovación de la red de distribución de agua potable en una de las zonas del término de Sant Antoni.
Asimismo, el consistorio de la isla pitiusa recibirá el 20% de la facturación anual del servicio de suministro, según informó el propio alcalde de la localidad, Pep Tur, en el pleno en que se aprobó la adjudicación del contrato. Con este canon, en el consistorio estiman que el beneficio para las arcas municipales será de 38,6 millones de euros durante los 25 años de vigencia.