ALCOY. Paco Aura, último superviviente valenciano del campo de concentración de Mauthausen, donde pasó más de cuatro años, ha fallecido este martes en Alcoy a un mes de cumplir 100 años y después de una vida dedicada a divulgar su historia para luchar contra la desmemoria, y trabajar por la paz y la concordia.
Tras conocerse su fallecimiento, el Ayuntamiento de Alcoy, que en 2014 puso su nombre al puente que une los barrios del Viaducte y Zona Nord, ha trasladado su apoyo y solidaridad "a la familia, compañeros y amigos en unos momentos dolorosos debido a la pérdida del alcoyano Paco Aura Boronat que el próximo 30 de diciembre habría cumplido 100 años".
"Nos ha dejado una persona que siempre formará parte de la historia de Alcoy y de la humanidad. Paco era ejemplo de todo aquello bueno que tiene el ser humano y dedicó la vida a recordarnos la parte más oscura de la historia de la humanidad para que nunca volviera a suceder", ha apuntado el alcalde de la localidad, Toni Francés (PSPV).
Francés ha calificado a Paco Aura como un hombre "humilde y sencillo, profundamente humano, ejemplo de dignidad y resistencia" que "nos mostró lo que significa la capacidad de perdonar, que no tiene nada a ver ni con el olvido ni con la impunidad. Paco seguirá con nosotros siempre, ejemplo de la lucha contra los totalitarismos, su experiencia nos hace tener muy presente que la democracia y la paz tenemos que cuidar día a día, y trabajar intensamente para defenderla cada segundo de nuestra vida".
El consistorio ha explicado, además, que estaba previsto a mitad de diciembre, coincidiendo con su cumpleaños, presentar una exposición sobre su vida y la reedición de un libro junto al Cahea. Así, el alcalde ha asegurado que se mantiene el acto que se convertirá así en "un sentido homenaje póstumo a su persona y a la gran tarea de divulgación que realizó a favor de la paz y la concordia".
Paco Aura vivió en primera persona una etapa "donde los totalitarismos abocaron el mundo a la guerra". Con 17 años vivió la Guerra Civil y la II Guerra Mundial como exiliado republicano en un campo francés. Fue deportado a Mauthausen (Austria) donde pasó más de cuatro años. Una vez liberado en 1945, tuvo que vivir ocho años más exiliado en Francia por miedo a la represión franquista. Aura fue uno de los 22 alcoyanos que fueron deportados a un campo nazi y último superviviente valenciano de la barbarie.
La ciudad de Alcoy puso su nombre al 2014 al puente que une el barrio del Viaducte con la Zona Nord. "Nos quedamos con las palabras que pronunció aquel día: 'Solo espero que este puente se convierta en un símbolo de la paz y la concordia y sirva de recuerdo para lo que ocurrió'", han destacado.
Aura ha realizado una importante tarea de divulgación sobre los campos de concentración, luchando contra la desmemoria de las personas, siempre convencido de la necesidad de recordar para evitar que estos hechos pudieran volver a ocurrir. Alrededor de su persona se ha publicado un libro Francisco Aura Boronat. Resistència y dignidad frente a la desmemòria, de Paco Blay, Àngel Beneito y Natxo Lara; y una novela gráfica de Jordi Peidro Esperaré siempre tú regreso, traducida al alemán, de la que también se hizo un corto audiovisual de la mano de la Red de Escuelas Asociadas de la Unesco y el Ayuntamiento de Alcoy.