ALICANTE. El salto de los hermanos Juan y Pedro Alcaraz desde el sector del alquiler de vehículos con su antigua empresa Goldcar a la promoción residencial de gama alta a través de Alibuilding (la rama promotora de su family office Aligrupo) ha creado en Alicante un player al mismo nivel que las grandes cotizadas como Neinor, Aedas o Metrovacesa. Al menos, en cuanto al ritmo de producción y cartera de inmuebles para entregar en los próximos dos años: 600 pisos en edificios en la costa alicantina o el centro de Madrid entre ya y 2021.
Pero la capacidad inversora y el 'hambre' de Alibuilding, dirigida por José Antonio Izquierdo con Daniel Torregrosa como consejero delegado de Aligrupo (y representante de los Alcaraz en muchas de sus participadas), no se acaba en los ocho residenciales que tienen en marcha o en proyecto desde Dénia hasta Alicante pasando por Calp o Benidorm, además de Madrid. Izquierdo ya avanzó hace unas semanas, en la presentación de la nueva boutique de Aligrupo en el centro de Alicante, que el family office tiene además una importante cartera de suelo y algunas nuevas oportunidades a la vista.
Y esos proyectos futuros, al parecer, volverán a apostar por la vivienda de gama media-alta cerca del mar, enfocada tanto al comprador nacional de interior con cierto poder adquisitivo como al extranjero que busca una segunda residencia junto al Mediterráneo. Así, mientras comienzan las obras del San Juan Beach o el Benidorm Beach, los Alcaraz ya tienen la vista puesta en sus futuros proyectos: en Finestrat, Polop y Busot. En este último caso, los planes pasan por levantar un nuevo residencial que siga las líneas maestras de sus últimos proyectos en el sector de Bonalba, dominado por las viviendas unifamiliares, el hotel y los campos de golf.
En cuanto a Finestrat y Polop, son dos poblaciones que se benefician del efecto arrastre de Benidorm, donde los Alcaraz han apostado por un proyecto que respete la idiosincrasia de la ciudad: una torre de 36 plantas con cerca de dos centenares de viviendas. Estos proyectos están en cola, a la espera de que se terminen las obras y se entreguen las 600 viviendas que Alibuilding piensa terminar hasta 2021. Un ritmo de entrega, de 200 pisos al año, que incluso mejora el de algunas de las promotoras citadas más arriba.
Los hermanos empresarios de Sant Joan d'Alacant han aprovechado el resurgir del inmobiliario en la Costa Blanca para dar el salto desde el sector de servicios turísticos, donde crearon una empresa valorada en 500 millones de euros (y ahora en manos de la francesa Europcar) a la promoción pura y dura, sin olvidar su papel como 'caseros' de primeras marcas, bien directamente o a través de alguna de las socimis en las que poseen participaciones significativas (Almagro, Trajano Iberia y Serrano 61). Y ese salto ha tenido como consecuencia inmediata el impulso al talento alicantino del sector, que no es poco.
Así, las primeras promociones de Alibuilding, cuando la incursión de los Alcaraz en el sector aún no estaba organizada en torno a la marca, tuvo como proveedor principal a la constructora CHM, que se ha reenganchado al ladrillo pese a tener su core en la obra civil. Y ahora, como ha contado este diario, la promotora ha confiado en la también Ecisa, que construirá su próximo residencial, San Juan Beach (104 viviendas) por 18 millones de euros.
Pero no solo se trata de constructoras. Desde el primer momento, los Alcaraz han confiado en la proptech alicantina Sonneil, fundada por el ex directivo de Solvia Alfredo Millá, para comercializar en exclusiva sus promociones. Si bien Sonneil tiene más clientes de parecido perfil, y con el tiempo han ampliado su campo de actuación, no cabe duda que la confianza de los fundadores de Goldcar en la startup supuso un apoyo fundamental para hacer crecer el proyecto. Como desveló este diario, esa confianza ha llegado al punto de que el propio Juan Alcaraz, a título particular, se haya convertido en accionista de Sonneil en su nueva faceta como business angel.