ALICANTE. Marta Martín Llaguno (Alicante, 1972) es una catedrática de la Universidad de Alicante y diputada en el Congreso de los Diputados por Alicante. Está considerada como una persona de confianza de Albert Rivera, donde ejerce de portavoz en uno de los temas donde la formación naranja se ha mostrada más tajante en su política, Educación. Martín desgrana su visión sobre el primer paso dado para aprobar los Presupuestos Generales del Estado, el rédito obtenido por Ciudadanos y la no intervención de otras formaciones.
-Los presupuestos generales del Estado han pasado el primer trámite gracias al voto de Ciudadanos y del PNV. ¿Está satisfecha con lo que ha conseguido su formación?
-No. Obviamente, los presupuestos generales del Estados que ahora se han aprobado no son los presupuestos de Ciudadanos. Lo que entendemos es que siempre es mejor tener un país con presupuesto de cara a la estabilidad, al progreso económico y al bienestar de la gente, y lo que hemos hecho es trabajar para introducir medidas sociales, que nosotros consideramos fundamentales para dar nuestro voto. Hemos logrado un aumento de 8.000 millones en políticas de Ciudadanos que hemos exigido, pero no son nuestros presupuestos. Hemos apoyado estas cuentas que han cumplido estas condiciones y porque no han vulnerado otros de los principios que para nosotros son fundamentales.
-Desde una visión de la Comunitat Valenciana, ¿entiende que haya críticas hacia Ciudadanos por respaldar esas cuentas?
-Por pedir...nos gustaría que recogieran cada de nuestras reivindicaciones. Me hace gracia que determinadas formaciones políticas critiquen a Ciudadanos por conseguir 8.000 millones en incremento y que ellos hayan conseguido cero. Por ejemplo, Compromís es el nacionalismo más inútil que hay en la Cámara en estos momentos... si es que hay utilidad en los nacionalismos. La foto de poner a Rajoy boca abajo con dos velas negras no llega a ninguna parte. Son presupuestos con tintes sociales que pueden beneficiar a muchos jóvenes y jubilados de la Comunitat Valenciana; padres, con sus permisos de paternidad o que llevan sus niños a las guarderías, ya que hemos conseguido una rebaja de 1.000 euros en la fiscalidad; a los mileuristas, que no tendrán que pagar IRPF... ¿Qué parte de las ventajas que hemos conseguido no le gusta a Compromís?
"No son nuestros presupuestos, pero hemos hecho todo lo que hemos podido... no como otros"
-¿Y en cuanto a inversión territorializada? Algo que se ve con mucha lupa...
-Obviamente, este año, Alicante no ha sido la provincia que mejor ha salido bien parada. Pero se va a beneficiar de muchas inversiones que se realizan en el global de la Comunitat Valenciana. Por ejemplo, para nosotros era prioritario la inversión en el Corredor Mediterráneo, que se incrementa en 1.000 millones y un tercio de esa cantidad va a la Comunitat. Y otra cosa, que yo siempre explico, la inversión territorializada no se debe contar por habitante, no me gusta que me digan que me toca medio ladrillo...me gusta que me digan es que me van a hacer el Corredor Mediterráneo para incrementar las exportaciones de la Comunitat. No son nuestros presupuestos, pero hemos hecho todo lo que hemos podido... no como otros.
-¿Usted cree que Compromís tenía que haber entrado en la negociación?
-Como todo el mundo. Compromís está en la Cámara representando a los valencianos. Si no consiguen nada, esos votos son menos útiles que los de los votantes de Ciudadanos que sí han conseguido una serie de medidas, que son nuestras reivindicaciones. Estamos porque debemos dar cuenta a todos los votantes.
-Otro de los asuntos que está en el debate es la reforma del sistema de financiación. ¿Por qué no arrancan las negociaciones?
-Tenemos un sistema de financiación que puso el PSOE, en el que el PP está muy cómodo y nunca ha querido cambiar, y nosotros ya hemos dicho que debe ser revisado. El PP no tiene mucho interés en abrir ese melón, y el PSOE tampoco está haciendo ninguna demostración para conseguirlo. Por tanto, tenemos un sistema en el que el bipartidismo está muy cómodo en este sistema y la consecuencia es que hay diferencias territoriales; y lo que hay que hacer es abrir el melón de financiación con las 17 comunidades autónomas, con condiciones de igualdad y con una negociación transparente. Lo que no puede ser es que Cataluña no se siente en la mesa y otras negocien bajo manga otras cuestiones.
"Tenemos un sistema de financiación que puso el PSOE, en el que el PP está muy cómodo y nunca ha querido cambiar"
-¿Lo dice por el cupo vasco?
-Sí, el cuponazo que votaron tanto el PP como el PSOE, y ahora se les llena la boca de reivindicar la financiación aquí, en la Comunitat Valenciana.
-Es de las pocas cosas que coinciden Ciudadanos y Compromís. Por ejemplo, Ximo Puig siempre defiende la igualdad entre ciudadanos y la singularidad de los territorios... ¿Lo comparte?
-Bueno, los derechos son los de ciudadanos, no de los territorios. Obviamente, consideramos que la cultura de cada zona de España es respetable y es una riqueza que debemos tener y preservar. Eso no implica que debamos ser desiguales y que tenga que haber inequidad territorial, que muchos confunden con el respeto a la singularidad. Nosotros defendemos un país, un proyecto de país, donde todos los ciudadanos seamos iguales con independencia del territorio en el que vivamos, iguales en derechos, iguales en deberes. Eso no significa que seamos uniformes y que debamos ser un país homogéneo. Todo lo contrario. La riqueza cultural de este país está en que cada uno de nosotros como individuos somos diferentes, pero también somos diferentes en virtud de la zona en la que hemos vivido, que tenemos especificidades culturales que son importantes.
-No hay negociaciones, de momento, por la financiación autonómica y tampoco hay Pacto por la Educación. ¿Por qué no lo hay?
-El viejo bipartidismo sigue en sus trece. Si hace unos años cuando hubo la primera negociación del pacto educativo, el PP no le quiso dar la medalla al PSOE, pues ahora es el PSOE el que, con excusas totalmente peregrinas, se ha levantado de la mesa porque no puede soportar que haya un pacto educativo sin que ellos estén en el Gobierno. Seguimos con la misma dinámica que ha habido en este país durante 40 años y que mientras no se rompa es una pena porque le estamos haciendo un flaco favor a las futuras generaciones y a las actuales. Ciudadanos siempre ha dicho que la educación es el futuro y es el tema más importante del que hemos dicho que hemos venido a reformar y a hacer una revolución. No desistimos. Si en este país volvemos a la Lomce es responsabilidad del PSOE, y si nos quedamos con el 3,56% de financiación para educación, también es responsabilidad del PSOE, que se ha levantado de la mesa.
-Pero, ¿ve factible ese pacto? ¿No lo hay por cuestiones políticas, pero si hay puntos de acuerdo?
-Totalmente. De hecho, hemos consensuado un guión con 15 puntos, que es el diagnóstico de lo que hay que reformar en este país y está hecho con el consenso de todos los partidos, incluida ERC y el PNV. Es una cuestión política, no educativa. Y si queremos reformar la educación en este país, debemos centramos en el debate educativo, y no en el político o sindical, que son debates importantes, pero que en este momento no toca. Ahora urge hacer una revolución porque estamos en la cola de muchos países europeos. Lo que no puede ser es que por egoísmos políticos y personalistas dejemos a una generación en la cola de nuestros colegas europeos.
"Si queremos reformar la educación en este país, debemos centramos en el debate educativo, y no en el político o sindical"
-¿Lo de los personalismos lo dice por alguien en concreto?
-Hay líderes políticos que en un momento dado cambiar su opinión respecto al apoyo al pacto educativo. Y se ha visto cuando ha cambiado el PSOE de líder, ha habido un cambio y un viraje en el planteamiento del PSOE. Además de que se ha levantado de la mesa del pacto educativo, no ha renunciado formalmente a esa comisión y, por tanto, impide que el resto de partidos podamos alcanzar un acuerdo.
-¿Ve factible que ese pacto se pueda reconducir o conforme está el ambiente político es imposible...?
-La subcomisión no se ha disuelto, tiene del plazo hasta el 15 de mayo, pero el problema es que no podemos votar. No vamos a renunciar a la reforma educativa. Estamos viendo lo que está sucediendo en Francia y debemos fijarnos en ellos. Los cambios los haremos, con ellos -en referencia al PSOE- o sin ellos.
-¿Qué le parece la Ley de Plurilingüismo aprobada por las Cortes Valencianas?
-Es una auténtico dislate. La derogaremos si tenemos capacidad de llegar al Ejecutivo. Será una de las primeras cosas que haremos. Todo lo que ha pasado en el tripartito en el ámbito educativo ha sido un despropósito. Desde el primer decreto que hizo (el conseller) Vicent Marzà, que ha sido anulado parcialmente, hasta el segundo decretazo, del que se está analizando si es inconstitucional por algo que denunció Ciudadanos, como era utilizar ese decreto para soslayar sentencias judiciales. Esta ley de plurilingüismo es una especie de plurilingüismo en diferido, descafeinado, que no contenta a nadie, que sigue imponiendo una serie de cosas que no tienen nada que ver con la lengua, sino con cuestiones ideológicas. Creemos que las lenguas hay que amarlas, no imponerlas. La Ley de Plurilingüismo ha sido un grave error al tratar de enfrentar a los valencianos en una cuestión que nunca ha sido problemática en esta Comunitat. No ha habido ningún conflicto con el uso de la lengua valenciana ni de las castellana. Un dislate absoluto. La derogaremos.
"AUNQUE EL IDEAL ES QUE TODOS LOS NIÑOS SEAN CAPACES DE DESARROLLARSE EN LAS TRES LENGUAS, PERO LA MANERA EN LA QUE SE TIENE QUE PROPONER ES DIFERENTE DEPENDIENDO DE LA REALIDAD SOCIOLINGÜÍSTICA"
-Algunos consideran que los que ustedes, Ciudadanos, defiende en Cataluña, el trilingüismo, se asemeja mucho a la Ley del Plurilingüismo aprobada en las Cortes Valencianas...
-No, no tienen nada que ver. De manera subterfugia, lo que está haciendo el señor Marzà es imponer un 65% de valenciano, con su planteamiento, incluso en zonas, donde no hay uso mayoritario del valenciano. Nosotros mantenemos el mismo discurso en todas las zonas de España, pero hay que tener en cuenta que la realidad sociolingüistica en Cataluña es diferente a la realidas sociolingüística en la Comunitat Valenciana. Aquí hay zonas más valencianoparlantes y zonas que son castellanoparlantes. Aunque el ideal es que todos los niños sean capaces de desarrollarse en las tres lenguas -las dos oficiales más el inglés-, la manera en la que se tiene que proponer es diferente dependiendo de la realidad sociolingüística. Por ello, creemos que Marzà está intentado hacer una imposición, con una ley que no ha tenido el consenso de la comunidad educativa y, además, consideramos que se está haciendo un uso muy ideológico de esa ley. Está consiguiendo todo lo contrario de lo que se pretendía: en lugar de amar el valenciano aquellas personas que son castellanoparlantes y defender en castellano en personas valencianoparlantes, los está enfrentando. La Constitución, en su artículo 3, dice que el castellano como lengua vehicular no es una cuestión graciable. Es un derecho y un deber de todos los españoles el aprender el castellano. Después, cada autonomía tiene su estatuto y hay que tratar las lenguas cooficiales como lenguas cooficiales, pero el castellano no se negocia.
-¿Está preparado Ciudadanos para gobernar?
-Yo creo que sí, pero yo soy de Ciudadanos. Pero sí. No solo porque tenemos un proyecto claro de país y ofrecemos, cada vez, medidas más concretas, más perfiladas y más trabajadas en todos los ámbitos. El partido tiene muy claro que gobernar es una responsabilidad muy grande y estamos preparándonos, más si cabe, para ejercer si en algún momento llega.
-¿Qué le parece que un dirigente de la talla de Manuel Valls haya sido propuesto por Albert Rivera para encabezar la lista a la Alcaldía de Barcelona?
-Es un tema que todavía no está cerrado. En política, si queremos gobernar, tienen que estar los mejores. En el contexto político en el que se encuentra Cataluña es una figura que puede ayudar a gobernar mejor Barcelona, sino a dar un cariz internacional al conflicto que están viviendo. Para estar en política hay que tener dos cosas muy claras: hay que ser capaz de ceder el paso cuando alguien llega, y lo hace bien preparado. El partido siempre lo ha hecho con el fichaje de muchos de nosotros. Y hay que tener generosidad, y tener muy claro que lo queremos; es decir, un proyecto de España, y no un sillón.
"LA LLEGADA DE PERFILES COMO MANUEL VALLS HAY QUE VERLO COMO UNA OPORTUNIDAD, Y NO UNA AMENAZA"
-Ese tipo de propuestas puede ir contra el sistema de primarias para los candidatos que tanto pregona Ciudadanos...
-Yo creo que los candidatos por lo general se eligen por primarias en Ciudadanos, y se eligen por primarias. El candidato que sea, sea Valls o Obama, debe someterse a unas primarias, y debe ser respaldado por la afiliación. Pero también es cierto que cuando hay figuras de este talante, el partido contempla algunas figuras como el eximente de tener que estar afiliado durante un tiempo antes. A mi, cuando me presenté, me aplicaron esa eximente y luego tuve que someterme a unas primarias. Los candidatos se eligen por primarias, pero la llegada de este tipo de perfiles que son muy buenos y tienen mucha experiencia, hay que verlo como una oportunidad, y no una amenaza. Es una oportunidad para crecer y servir mejor a lo que los ciudadanos no están pidiendo.
-¿Toni Cantó va a ser el candidato a la Presidencia de la Genealitat Valenciana?
-Eso habrá que preguntárselo a Toni Cantó, y a la afiliación que deberá elegirlo, en caso de que se presente. Es una decisión de Toni y de los militantes. Si él decide presentarse a las primarias, pues deberemos respaldarle. Toni Cantó sería un magnífico candidato, pero también hay más gente.
"¿TONI CANTÓ CANDIDATO A LA GENERALITAT? SI ÉL DECIDE PRESENTARSE A LAS PRIMARIAS, PUES DEBEREMOS RESPALDARLE. SERÍA UN MAGNÍFICO CANDIDATO, PERO TAMBIÉN HAY MÁS GENTE"
-Y si a usted le proponen ser candidata a la Alcaldía de Alicante, ¿qué haría?
-Yo ahora soy diputada al Congreso y llevo los temas de Educación. Tenemos a Yaneth Giraldo que lo está haciendo fantásticamente bien; tiene mucho carisma, que ha sido muy seria, muy trabajadora, y ha gestionado muy situaciones difíciles. Yo estoy haciendo lo que el partido me encomendó, que eran dos cosas: trabajar por el pacto nacional por la violencia de género, que se cerró, y trabajar por la cuestión educativa. Es lo que estoy haciendo y me siento muy halagada de aportar a aquello que afecta a mi experiencia profesional. Si el partido me pide otra cosa, me lo tendré que pensar, intentaré ayudar y hacerlo lo mejor posible.