CASTELLÓ. Grupo Pamesa ha firmado este martes 20 de octubre el primer documento para la compra de la mitad de Argenta y Cifre hasta ahora propiedad de la familia Usó. Las próximas adquisiciones del capital social las materializará "en las próximas semanas".
La ratificación del anuncio lanzado en febrero por estas tres compañías se produce después de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) haya notificado su autorización a la operación, de la que todavía no ha dado cuenta en su página web. Esta ha sido una tramitación rápida, pues no fue hasta este verano cuando Competencia recibió el expediente y comenzó a valorarlo.
De esta manera, Grupo Pamesa refuerza su expansión con la mitad del capital social de dos azulejeras referentes en el sector y que, en conjunto, facturaron el año pasado alrededor de 280 millones de euros. Fuentes internas han destacado que se trata "de una operación financiera con mucho sentido".
Y es que el acuerdo va a permitir a todas las compañías involucradas (Grupo Pamesa cuenta con un entramado formado por decenas de sociedades) "optimizar sinergias, mejorar sus productividades y rentabilidades, dado que van a existir mayores volúmenes de compra y economías de escala a nivel de fabricación, una mejor y mayor oferta de material cerámico y una clara apuesta por el mejor servicio para los clientes de cada una de las marcas".
Asimismo, las fuentes destacan que en Argenta y Cifre "entra un accionista de crecimiento industrial". Esto se verá refrendado con "diferentes proyectos de inversión para el año que viene" que por el momento desde las compañías prefieren no desvelar pero que afectarán a su capacidad productiva y logística con el fin de incrementar las ventas.
En cuanto a la gestión, como ya se anunció en su momento, al frente de Argenta y Cifre continuarán los mismos equipos directivos.