DE LA HUERTA A LA ESCUELA 

¿A qué suena la Universitat Politècnica?

9/11/2023 - 

VALÈNCIA. Una máquina de café, el crujir de los zapatos por el pasillo, el césped que se mueve a causa del viento, el timbre del final de una clase… Todos estos sonidos pueden vivir dentro de la universidad, pero por lo general pasan desapercibidos. Cualquiera de ellos, con el toque de emocionalidad adecuada, puede trasladar -mentalmente- a cualquier estudiante a una “vuelta al cole” gracias a la memoria de un circuito cerrado y conocido. Estas emociones sonoras, ahora encapsuladas, viven en el podcast Dialécticas Politécnicas, creado por Alberto Quintana Gallardo. 

El ingeniero acústico e investigador del Centro de Tecnologías Físicas se reta a explorar a qué suena realmente la Universitat Politècnica a través de cuatro capítulos: Semillas y límites, sobre donde empieza la universidad y donde acaba la ciudad; Neverland, sobre cómo la universidad se rejuvenece constantemente; The sound of numbers, abordando la acústica del campus; y para concluir El fin de la politécnica, en el que reflexiona sobre el futuro incierto de la universidad. Todo ello de la mano de un equipo de trabajo compuesto también por Lorena M. Yuste, editora y especialista en podcast e Ignacio Guillén Guillamón, profesor en la escuela de arquitectura

Este diálogo explora los sonidos naturales y tecnológicos escondidos por la universidad, percibidos por quien se graduó allí y que con motivo de volver a la Politècnica se obsesiona con crear sus espacios sonoros a través de este proyecto. Quintana explica que lo hace para crear “el patrimonio artístico y sonoro del espacio”, a través de los sonidos únicos del lugar: “Empecé a rayar planos de la Universitat Politècnica, y a plantearme un recorrido por diversos lugares. Después de esto empecé a preguntar mucho a otros estudiantes, porque cada persona tiene una identidad que nos lleva a escuchar una u otra cosa, es clave preguntar lo que están pensando”, explica sobre su proceso de creación, sobre el que añade testimonios reales, entrevistas y sonidos en bruto de varios espacios del campus.

Mientras que para el autor del podcast la Politècnica se asocia directamente con el sonido de los pájaros para otros estudiantes es más característico el sonido de las hojas o del tranvía cuando pasa, un descubrimiento al que llega gracias a sus entrevistas: “Todo cambia si te metes en laboratorios, los sonidos son de aparatos y diferentes a los míos, nadie tiene creado el mismo mapa”, y este a la vez es un concepto que le da magia al asunto. Gracias a moverse a lo largo y ancho de todo el campus ha descubierto, de cierta manera, que su mapa conceptual está formado por muchas más personas de las que se imagina, como si al pasear de esta nueva forma por la facultad destapara “una especie de hormiguero”: “Es increíble la de colectivos y personas que hay dentro de la universidad quienes hacen que se mantenga funcionando. Para mi la universidad ahora es como una especie de organismo gigante donde creo que se conforma una institución increíble con un gran número de personas”. 

Al igual que pregunta a los estudiantes y a las “hormigas” de este enorme organismo, Quintana acepta acompañantes en el paseo para que le ayuden a comprender mejor la sonoridad del espacio. En el caso del primer episodio (ya en abierto) le acompaña la poeta Elsa Moreno quien crea varias narraciones a lo largo de cada capítulo para que el oyente cuente con un contexto clave y que además permite aportar un toque cultural al programa, que para Quintana es clave: “Considero que la cultura y el arte tienen que ser la cabeza de todo, luego viene la filosofía, por ejemplo. Creo que es importante dar una visión más artística a las cosas”, aporta sobre su iniciativa de generar también un recorrido poético de la mano de Moreno.

Ella, tras su participación en el programa -con textos originales- considera que trabaja sobre la ficción sonora, creando un paisaje poético de un lugar que tiene una gran historia que se cuenta a través de quienes conviven ahí. En el primer programa aborda los límites del campus con la ciudad a través de sus versos: “Hablamos de forma poética de cómo la universidad contaba con una zona marginada y límite con la ciudad. Lo bueno de la Universitat Politècnica es que a día de hoy ha crecido tanto y ganado tanto prestigio que ahora todo el mundo quiere venir aquí, a una pequeña ciudad que de alguna manera se limita con la otra ciudad que es València”. Cuatro programas difunden los límites y acercan la universidad a ya graduados, aquellos que lleguen por venir y permiten que el espectáculo lo protagonicen expertos, poetas, pájaros y demás voces que sobrevuelan el campus. 

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