Ábalos sofoca el primer conato de rebelión en el 'sanchismo' aunque enfada a los 'patxistas'

VALÈNCIA. El secretario general provincial del PSPV de València y portavoz en el Congreso, José Luis Ábalos, se enfrentó este sábado a una primera prueba de cara a su futuro puesto como secretario de Organización del PSOE. El envite no era fácil: diseñar la lista de delegados de Valencia que acudirán al cónclave federal que tendrá lugar los días 16, 17 y 18 de junio tras el complicado proceso de primarias que dio como vencedor a Pedro Sánchez frente a Susana Díaz y Patxi López.

Así, tal y como ha venido informando este diario, el líder del PSPV, Ximo Puig, quien había apoyado a la andaluza, dio orden de no presentar batalla y aceptar el resultado porcentual de las primarias para el reparto de delegados. Una directriz que en gran medida se cumplió en las asambleas locales previas a los 'congresillos' provinciales. El de Valencia tuvo lugar este sábado, mientras que los de Alicante y Castellón se celebran hoy.

En esta línea, no hubo demasiados problemas según relatan fuentes socialistas con los 'susanistas', que aceptaron la oferta de 13 delegados de los 52 en liza en la provincia de Valencia. Más conflicto tuvo Ábalos con los propios grupos que habían apoyado a Sánchez, lo que provocó intensas negociaciones en la jornada matinal celebrada en la sede de la UGT.

Sobre esto, fuentes del partido apuntaron a que el sector liderado por el diputado provincial y portavoz del lobby socialista 3.0, Bartolomé Nofuentes, pedía 11 delegados para repartir entre las plataformas locales pro Sánchez que se habían constituido y para satisfacer a los territorios donde su corriente había cosechado buenos resultados. En cambio, diversas fuentes apuntaron a que Ábalos consideraba que debían anotárseles cuatro delegados.

La negociación estuvo a punto de romperse, aseguraron a este diario varios dirigentes, e incluso Nofuentes llegó a plantear la posibilidad de presentar una lista alternativa, si bien finalmente se produjo un acuerdo intermedio que se cifró en torno a 8 delegados -las distintas fuentes no se ponen de acuerdo en el número exacto-, aunque ambas partes coincidieron en dar por bueno el pacto.

Los seguidores de Patxi López, enfadados

Por otro lado, también hubo tensión -y esta no se resolvió con éxito- con los seguidores de Patxi López. Así, fuentes de la candidatura del exlehendakari lamentaron que no hubiera sido aceptado ni un solo nombre de los que cuatro que habían puesto sobre la mesa. En este sentido, las citadas fuentes puntualizaron que su proposición era la de incluir a Carles Arques, Inocencia Albert, Jesús Rosaleny y Concha Garcís, pero finalmente ninguno de ellos entró en la lista. "Nos han humillado, nos han dejado fuera por la pugna en el 'sanchismo'", señalaban fuentes oficiales del grupo a este diario, unas críticas a las que también se sumó la corriente Izquierda Socialista, que se quedó sin representantes pese a, según su coordinador, Kilian Cuerda, haber llegado a un acuerdo con el 'sanchismo'.

Unos rifirrafes a los que restaban importancia desde el entorno de Ábalos, al señalar que en un proceso de estas características "todo el mundo" quiere "más representantes", además de deslizar que en la lista sí había entrado algún miembro que simpatizaba con Patxi López y recordar que solo obtuvieron un 1,1% en las asambleas locales.

Finalmente, y tras más de cuatro horas de 'congresillo', la delegación presentada y encabezada por Ábalos conseguía un 85,5% de las papeletas -fue votación en urna- repartidas en 289 a favor, 42 abstenciones y siete nulos, en un proceso en el que a los 'susanistas' -seguidores de Puig- se les atribuyó desde la otra orilla el grueso de los sufragios en blanco.

En cuanto a la lista (VER AQUÍ), tras Ábalos se sitúa una de las personas de su confianza, la diputada Mercedes Caballero, a la que sigue el exeuroparlamentario Andrés Perelló, otro de los dirigentes que ha hecho campaña activa por Sánchez. En el cuarto puesto figura la alcaldesa de Gandia, Diana Morant, que apoyó a Díaz, y después el alcalde de Burjassot, Rafa García, la diputada provincial Mercedes Berenguer, el portavoz de Les Corts, Manolo Mata, y la concejal de València, Maite Girau; todos ellos seguidores de Sánchez. Un bloque que concluye con el alcalde de Mistala, Carlos Fernández Bielsa, que respaldó a Díaz.

Entre los otros nombres destacados del 'sanchismo' -que copó 39 (75%) de los 52 delegados- que se integran en la lista están el alcalde de Torrent, Jesús Ros, el propio Bartolomé Nofuentes, el alcalde de Xirivella, Michel Montaner, el secretario comarcal de Utiel-Requena, Toni Quintana, Gloria Calero o Vicent Vercher. Mientras, de los que apoyaron a Díaz figuran el alcalde de Paterna, Juan Antonio Sagredo, la portavoz en el Ayuntamiento de València, Sandra Gómez, el concejal en el Cap i Casal, Ramón Vilar, la alcaldesa de Algemesí, Marta Trenzano, Francesc Romeu o el alcalde de Picanya, Pep Almenar.