Ninot que representa la polémica relación entre Pere Fuset y Lo Rat Penat. Foto: Marga Ferrer.La polémica por la clasificación de las fallas de Especial sigue coleando en el primer año con el tripartito a la cabeza, que sí ha acertado con el cambio de sede de la Exposició del Ninot
VALENCIA. Las del cambio, las de las novedades o, simplemente, las de la polémica. Sea cual sea el apellido, lo cierto es que es imposible pensar en las Fallas de 2016 sin hablar de política. Con el tripartito a la cabeza del gobierno local, la tarea del nuevo concejal de Cultura Festiva y presidente de Junta Central Fallera (JCF), Pere Fuset, ha sido la de imprimir en tiempo récord las formas e ideas de la izquierda en una fiesta liderada durante 24 años por el Partido Popular. No en vano, él mismo ha verbalizado su intención de reconquistar un espacio abandonado por la gauche divine, que subestimó el poder del mayor tejido asociativo de la ciudad. Tiempo de balance, de identificar los aciertos y errores de unas Fallas que, aunque el propio edil de Compromís las calificó como las del “diagnóstico”, han dado pasos agigantados para cambiar el rumbo de un barco con muchos pasajeros.
La Exposició del Ninot cambiaba este año de sede. De ubicarse en una carpa frente a un centro comercial a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, “la Lonja del siglo XXI”, tal y como describió el concejal. La mudanza ha sido aplaudida por propios y extraños, una muestra que este año ha sumado 82.255 visitas, 5.700 más que en 2015, suma que incluye entradas vendidas y aquellas facilitadas a las comisiones participantes.
El cambio de ubicación ha dotado de mayor espacio a unas figuras que antaño se mostraban apelotonadas. El resultado parece haber sido tan satisfactorio que, cuando apenas pasaban unas horas de su inauguración, ya se anunció la intención de afianzar la relación entre unos y otros. “Espero que sea permanente”, aseveró el director general de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, Enrique Vidal, durante la presentación de la que exposición, un museo que definió como la nueva “casa de los falleros”.
Si hay un capítulo todavía por escribir su final es el del polémico veredicto del jurado de las fallas de Especial. Tras darse a conocer la vencedora, Cuba-Literato Azorín, no han sido pocas las comisiones que han reclamado una revisión de la clasificación. La sorpresa ha llegado al comprobar que los siete miembros del jurado coincidieron es su puntuación otorgando la misma posición a cada una de las comisiones, una casualidad que ha levantado ampollas entre Convento Jerusalén, l'Antiga de Campanar, Sueca-Literato Azorín y Na Jordana, que han demandado la inhabilitación de los mismos.
Respecto a las dudas generadas en torno a la concesión de premios, Fuset ha pedido el máximo respeto a la decisión del jurado, "la comparta o no", "desde el momento en que su composición fue acordada por unanimidad en una reunión de las fallas de Especial. La Junta Central Fallera hizo lo que debía, facilitar el acuerdo". De igual forma incidió en la necesidad de "avanzar en la profesionalización de los jurados de fallas, teniendo en cuenta que valoran conceptos de alto valor cultural y sentimental como el trabajo de los artistas y la ilusión de las comisiones".
Por el momento, la polémica ha dejado su primera víctima. El artista Alejandro Santaeulalia, que este año repetía plaza en l'Antiga de Campanar, ya ha anunciado que renuncia a plantar en Especial -a pesar de que ya tiene contrato- al no ver "claro" el veredicto emitido por el jurado. En declaraciones a Europa Press, el artista no descartó la opción de aceptar propuestas para comisiones que jueguen en otra categoría, para así desarrollar "más íntimo, más 'delicatessen' y sin las presiones de los premios". La polémica está servida. "Que cada uno saque sus propias conclusiones".
Un tira y afloja que ha durado meses y que, finalmente, ha dado sus frutos. Las Fallas conseguían este año una cobertura sin precedentes en el ámbito nacional gracias a un acuerdo con Radiotelevisión Española que ha resultado en numerosas emisiones en torno a la fiesta josefina. El convenio aseguró la emisión a través de La 1 y La 2 de de actos como la Crida, la mascletà del 19 de marzo y la cremà.
En un año centrado en la promoción, forzada por la posible catalogación de la fiesta como Patrimonio de la Humanidad, las televisiones privadas también se han aproximado a las Fallas, al igual que medios de numerosos países como Estados Unidos, China, Irlanda, Rumanía, Serbia o Chile. Conquista internacional a la espera de que el Consell recupere la televisión autonómica. “Es imprescindible que los valencianos tengamos una televisión pública y esperamos tenerla por muchas razones, entre otras por acrecentar la difusión de nuestras fiestas”, explicó Fuset.
La Federación Empresarial de Hostelería de Valencia (FEHV) denunció supuestas irregularidades que se cometieron en algunos puestos de comida ubicados en el cruce entre la Calle Xàtiva y Marqués de Sotelo. La agrupación alertó sobre la elaboración de alimentos en la vía pública "sin las mínimas condiciones de refrigeración y próximas a fuentes de calor". Además, también criticaron la acumulación de bombonas de butano cercanas y la ambientación musical
"[Estas] son algunas de las irregularidades detectadas durante los primeros días de las fiestas falleras en varios de estos puestos y que han sido puestas en conocimiento de las autoridades y del ayuntamiento de Valencia sin haber obtenido respuesta hasta el momento", lamentaron desde la FEHV, quienes invitaron a la administración a reflexionar sobre la conveniencia o no de este tipo de actividades ambulantes para proyección turística de la ciudad.
La campaña gráfica de las Fallas cambió este año su proceso de selección, una llamada abierta con la el Ayuntamiento esperaba profesionalizar el proyecto comunicativo. Ibán Ramón fue el seleccionado de entre 37 estudios y profesionales que participaron en la convocatoria, a la que aspiraron a este encargo un gran número de profesionales valencianos y también procedentes del País Vasco, Madrid, y de países como Italia o Rusia. También el jurado cambió de cara, con la inclusión de representantes de la Asociación de Diseñadores de la Comunidad Valenciana; la Asociación Profesional de Ilustradores de Valencia; o la Asociación de empresas de Comunicación Publicitaria de la Comunidad Valenciana.
Este mecanismo se espera que se repita en el proceso de selección de falla municipal, tal y como ya ha anunciado Pere Fuset. El cambio busca atraer a más profesionales, pues este año sólo recibieron una propuesta para la falla grande. La llamada a proyecto pondrá el acento en la trayectoria del artista y mejorará las condiciones para evitar que éstos asuman riesgos económicos. Además, se introducirán otros cambios como incluir como criterio evaluable "el uso de materiales que permitan una 'cremà' limpia", con lo que se apostará por la creación a partir de materiales sostenibles.
Un plan ambicioso el del nuevo equipo de gobierno que, en cuestión de Fallas, todavía tiene dos grandes cuentas pendientes: un plan para la Ciudad del Artista Fallero y la ejecución del estudio de impacto económico. Aunque éste se anunció antes de que acabara 2015, llegándose a concretar la colaboración con la Facultat d'Economía de la Universitat de València y la Cámara de Comercio, lo cierto es que todavía no se ha iniciado.
La Crida de esta año llegó con varias novedades, aunque dos afectaron directamente a los discursos. Tras el recordado caloret de Rita Barberá, Joan Ribó optó por un discurso breve y dejar el protagonismo a las falleras mayores de Valencia. En plurarl, sí, porque por primera vez la representante infantil se dirigió al público desde las Torres de Serranos. Este año también ha sido el del estreno de la cabalgata del Patrimonio y el de la pirotecnia.
Este año, a este respecto, se han aumentado las retribuciones que han de percibir las empresas pirotécnicas por cada espectáculo que disparan (mascletaes, mascletaes nocturnas y castillos de fuegos artificiales). También se ha incrementado el número de espectáculos de esta índole, mascletaes que han podido ver 200 vecinos desde el balcón del Ayuntamiento gracias a un sorteo en el que se inscribieron 21.000 personas.
Otro de los grandes proyectos pendientes es la rehabilitación de la Ciudad del Artista Fallero. Antes de cerrar 2015, y a propuesta del grupo municipal Ciudadanos, todos los partidos políticos con representación en el hemiciclo firmaron un acuerdo para poner en marcha un plan de revitalización que acabe con la difícil situación del complejo, que ha perdido la mitad de 'población' fallera en los últimos años. "Está condenada a desaparecer cuando podría ser un gran espacio de creatividad y no podemos permitirlo", indicó Fernando Giner este mes.
Sin embargo, las intenciones, al menos a corto plazo, se quedarán en eso pues, tal y como afirmó el alcalde de Valencia, Joan Ribó, en una reciente visita a la Ciudad del Artista Fallero, el presupuesto municipal fue aprobado "sin tiempo" para este proyecto, con lo que el plan de revitalización al que se comprometieron las diferentes fuerzas políticas habrá de esperar, al menos, hasta 2017.
