Acrilatos culmina la ampliación de su planta de Onda y diversifica su producción fuera del azulejo

CASTELLÓ. La empresa química Acrilatos ha ampliado su fábrica de Onda con cuatro naves adosadas para introducir nuevos productos y aumentar su capacidad de obtención de silicato sólido en solución acuosa. Las nuevas instalaciones se han sumado a las tres naves que ya existían para alcanzar un espacio industrial de 24.157 metros cuadrados en el polígono El Colomer.

El nuevo reactor y la nueva caldera de aceite térmico permiten elevar la capacidad para producir silicato sódico en solución acuosa de 80.300 a 98.700 toneladas anuales. Este defloculante es utilizado en el proceso de fabricación de productos cerámicos de gres.

La compañía también aumenta su umbral de producción de poliacrilatos y de poliacrilamidas en mayor medida: de 27.375 a 60.250 toneladas al año, con lo que más que duplica su capacidad. Estos son dos polímeros que se usan como materia prima para la fabricación de papel, para pañales absorbentes o para el tratamiento del agua, entre otros muchos usos.

Las nuevas naves también permiten aumentar la capacidad para producir poliflux, una sustancia que se obtiene de mezclar el silicato sódico y el poliacrilato, de 88.330 a 160.000 toneladas anuales, es decir, cerca del doble.

Reorganización de la producción

Con esta ampliación de las instalaciones, Acrilatos abre la puerta a la fabricación de granulados gracias a la implantación de un nuevo espacio con varios filtros de aspiración y de mangas, así como un secadero y una coloreadora de sólido. Según fuentes de la empresa, esto acarrea el traslado de la mezcladora en uve a una de las naves recién construidas, dotada de una nueva ensacadora automatizada, y se implanta una nueva planta de secado de silicato sólido con capacidad para producir 60.000 toneladas anuales de forma conjunta.

En otra de las nuevas naves, la empresa también tiene vía libre para empezar a producir, envasar y almacenar hasta 6.000 toneladas anuales de gel hidroalcohólico. Además, la nueva planta de ósmosis inversa construida en un cobertizo permite tratar una parte del agua antes de su utilización en el proceso de producción del gel hidroalcohólico. Acrilatos ya tramitó la correspondiente concesión de aguas subterráneas ante la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para incrementar el caudal concedido de 6.856 a 51.163 hectómetros cúbicos anuales.

Paneles solares para la mejora energética

Una torre de refrigeración exterior para el proceso de mezclas, así como maquinaria para los talleres y el laboratorio completan la nueva dotación. Acrilatos ha completado la ampliación de la fábrica de Onda con la instalación de paneles fotovoltaicos para autoconsumo en la azotea de las naves con el objetivo de ahorrar un 18% de energía. También ha habilitado varios postes para la recarga de vehículos eléctricos en el parking de las oficinas.

La empresa química, fundada en el año 2000 con la intención de fabricar y distribuir defloculantes y aditivos para la industria cerámica, está en una etapa de crecimiento. El 90% de su producción tiene como destino el sector azulejero castellonense y el resto se exporta a países de Latinoamérica, Asia, África y el este de Europa. Ahora, con la ampliación, puede aumentar su peso fuera del sector cerámico.