VALÈNCIA (EP). Adif iniciará el próximo lunes la fase principal de las obras de restauración integral del histórico edificio que alberga la estación de València Nord, con el fin de poner en valor su arquitectura original y preservar el inmueble y su funcionalidad para el servicio ferroviario.
Esta actuación es la primera gran restauración que se acomete en el "emblemático" edificio y consistirá en la renovación de la cubierta de su marquesina histórica y la recuperación de sus diferentes elementos ornamentales originales. Adif destina a esta operación una inversión de 17,7 millones de euros, que desarrollará en 28 meses, según ha informado la compañía en un comunicado.
La renovación y modernización de la estructura de la marquesina histórica que cubre los andenes de la estación (200 metros de longitud, 45 de anchura y una superficie de unos 9.000 m2) sustituirá la cubierta actual por una nueva de zinc y, en su parte superior, incorporará materiales que permitan el paso de la luz para reforzar la luminosidad e iluminación natural. Esta fase, la de mayor envergadura, se realizará en 26 meses.
Asimismo, en las naves laterales de la estación y sus cubiertas se acometerán trabajos para la recuperación de sus elementos y la mejora de su impermeabilización y su conservación. Además, se actuará en las carpinterías de las distintas fachadas de la estación, sus marquesinas de entrada y en la verja metálica, con el fin de restituir de los elementos de los efectos del paso del tiempo y la meteorología.
Con anterioridad a fase principal se han acometido trabajos previos como la implantación del campamento de obra, la reordenación de la circulación de los taxis y la reconfiguración del aparcamiento en la estación. También se han iniciado los trabajos de restauración en la cubierta plana del cuerpo principal de la estación.
A partir de ahora se desarrollará el grueso de las obras en la marquesina histórica, en tres etapas de aproximadamente 3.000 m2 cada una. La primera de ellas se ejecutará en la zona más próxima a la fachada interior, en la segunda se trabajará en la zona central desde la línea de toperas hasta mitad del andén cubierto y la tercera incluirá la superficie restante.
Las obras consisten en la limpieza de la estructura metálica, que sufre "los efectos de la oxidación y deformaciones". Así, se reforzará e imprimará con una nueva pintura y se cubrirá con escamas de zinc, recuperando el aspecto original al permitir el paso de la luz en el tercio superior, que se cubrirá con planchas de policarbonato.
La actuación "no afectará a los viajeros ni al servicio ferroviario", garantiza Adif. Para ello, se instalará una plataforma de trabajo, que independizará la zona de actuación de cada etapa de la cubierta de los viajeros, que circularán bajo ella.
Entre las operaciones "más complejas" se encuentra el desmontaje y retirada de las placas de amianto de la cubierta, que va a ser realizado por una empresa especializada, bajo los requisitos contemplados en la normativa.
Para ello, la plataforma de trabajo estará impermeabilizada para conseguir un encapsulamiento de la zona de trabajo, que elimine el riesgo de caídas de piezas o desprendimientos de fibras de amianto. Las placas de fibrocemento se retirarán y se paletizarán, embalándolas antes de bajarlas a la zona de acopio para su posterior gestión.
Asimismo, para no "alterar el funcionamiento de la estación", se habilitarán itinerarios para los viajeros y estacionamientos alternativos de los trenes en cada una de las fases de la obra, especialmente en las etapas central y final.
En paralelo a esta fase principal se realizarán los trabajos en las naves laterales de la estación y las fachadas, que consistirán en el mantenimiento de los valores espaciales, funcionales, compositivos, constructivos, materiales y formales que se conservan en el edificio original y la recuperación de esos mismos valores allí en dónde se hayan visto alterados.
La ejecución de las obras se realiza con el apoyo de la metodología de trabajo Building Information Modeling (BIM) que permite planificar, diseñar y construir de forma "colaborativa" entre "todos los agentes implicados" y en entornos digitales, con la generación de una fuente única de información que facilitará el seguimiento de la obra y unificará digitalmente la información del edificio.
El edificio que alberga València Estació del Nord data de 1917 y es un monumento simbólico del estilo modernista, con influencia del secesionismo vienés. Obra del arquitecto valenciano Demetrio Ribes, ha sido declarado Bien de Interés Cultural y patrimonio histórico. La estación combina el atractivo artístico e histórico de su inmueble con la funcionalidad en la prestación de servicios ferroviarios y espacios comerciales.
La actuación pondrá en valor y garantizará la preservación del patrimonio historio y arquitectónico que constituye el edificio de la estación, en el que además abundan elementos propios de la identidad local, un repertorio iconográfico de motivos valencianos distribuidos por la fachada, las barandillas, las vidrieras, los remates almenados y las puertas, entre otras ubicaciones.
Estas actuaciones cuentan con financiación europea a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea NextGenerationEU.