VALÈNCIA. La telefonía, un año más, encabeza el ranking de las reclamaciones que los vecinos de Quart de Poblet realizan en la Oficina Municipal del Consumidor de (OMIC). Es muy difícil desbancar a este sector que acaba con la paciencia de los consumidores en muchas ocasiones. Eso sí, un dato a su favor es que las quejas se han reducido del 51,4% a un 39,5%.
La mayor novedad está en las agencias de viajes y en los transportes aéreo y marítimo, sobre todo cruceros. Durante el año de la pandemia aumentaron las reclamaciones en este sector un 608%. El mayor problema con el que se han encontrado los vecinos y vecinas ha sido que preferían que les devolvieran el dinero de sus reservas en lugar de un bono de viaje que se podía canjear durante un período de tiempo. Al principio, algunos aceptaron esta propuesta pero, debido a los sucesivas restricciones sanitarias, preferían la devolución del importe adelantado. Algo que, en muchas ocasiones, ha sido complicado conseguir, entre otras coas porque muchas de las agencias de transporte han cerrado.
Sin embargo, la OMIC ha conseguido recuperar varias cantidades de dinero en algunos casos por valor superior a los 1.000 euros . El confinamiento y las restricciones horarias también ha provocado que los vecinos de Quart de Poblet compren más por internet. Este hecho también ha supuesto más reclamaciones por problemas ocasionados por las transacciones online.
El servicio de mediación del consistorio ha recibido 314 reclamaciones, de las cuales han llegado a un acuerdo entre las partes en 187 de ellas. Del mismo modo, el servicio se implica también con las personas más vulnerables. Este es el caso de un vecino que, pese a haber formalizado telefónicamente un contrato, no se había dado realmente cuenta de lo que estaba haciendo.
El personal del ayuntamiento, al escuchar las grabaciones percibió "un llanto desgarrador" en el que se lamentaba de su error. Así, los trabajadores del OMIC no cesaron en su empeño de solucionar la situación y, tras realizar una discrepancia con la empresa y argumentar una situación de vulnerabilidad, consiguieron que se pudiera anular dicho contrato.
Este servicio es gratuito y pueden acceder a él todas las personas empadronadas en el municipio.
Cristina Mora, presidenta de la Mancomunidad del Barrio del Cristo, solicitó en marzo este servicio a la Autoridad de Transporte Metropolitano de Valencia (ATMV)
