Qué inmensa alegría, señor Ribó, oír que se van a contratar a muchos conductores nuevos para la EMT y que poco a poco se va incrementando los vehículos nuevos en el parque de la empresa municipal de transporte público. Y no lo digo solo por el aporte ecológico para la contaminación que padecemos, que también, sino por la urgente necesidad de 'jubilar' algunos autobuses que ya no cumplen los 16 años, y a algunos conductores que van como locos por la ciudad.
1/11/2016 -
Hace aproximadamente un año escribí en este medio una recomendación a nuestro querido alcalde, Joan Ribó, que una frase del catalogado maestro de la autoayuda americano, Jim Rohn, le iba como anillo al dedo: "Tu vida no mejora por casualidad, mejora con los cambios". Y hay que reconocer que a pesar de algunos mal intencionados que dicen que no ha hecho gran cosa, yo creo que en algunas materias relacionadas con el bienestar de los ciudadanos, sí.
Valga como muestra algo tan importante para miles y miles de valencianos que todos los días tienen que desplazarse con el servicio público. Acaban de anunciar una importante inversión para contratar conductores en la EMT, concretamente 87 que se suman a los 44 del año 2015, y la adquisición de 37 nuevos modelos ( dos de ellos eléctricos y el resto híbridos) para rebajar contaminación y ganar en seguridad.
Esto contrasta con la etapa anterior donde en los años 2011,2012,2013 y 2014, tan solo se compraron dos unidades. De vergüenza. Con todo ello hemos de llegar a una ciudad limpia y una movilidad sostenible objetivo prioritario en los nuevos gobernantes.
La educación, requisito imprescindible
Siendo muy loable la contratación de conductores y la renovación del vetusto parque automovilístico, pienso que Joan Ribó debería disfrazarse de lagarterana a o lo que fuera y recorrer varias líneas como un ciudadano más de a pie. Seguramente se quedaría anonadado al comprobar cómo conducen algunos (que no todos) de sus chicos. Van a velocidades muy superiores a las permitidas, se saltan semáforos, realizan maniobras peligrosas, no respetan al resto de conductores -especialmente a las bicicletas-, pasan rozando a los peatones que van por la calzada o se disponen a cruzar en un semáforo...
Qué bueno que entre savia nueva, pero les puedo asegurar que un curso acelerado a los que ya están y un filtro importante en materia de educación vial para los que entran, les hace más falta que el comer. Por indicarles una pista, comprueben cuántos partes de accidentes tienen algunos de esos conductores y quién es el culpable.
Pero si el conductor es la mano que mece la cuna, no menos importante es el estado en el que se encuentran algunos( por desgracia la mayoría) de los autobuses que circulan por la ciudad. Hay matrículas con más de 17 años de antigüedad, contaminación a tope, el estado de frenos y amortiguadores lamentable, por no entrar en los neumáticos. Si se fijan en las fotos, el mismo vehículo fotografiado unos días antes está inclinado hacia la derecha y otros más tarde a la izquierda.
Deberían tomarse todo esto muy en serio antes que tengamos que lamentar accidentes importantes con víctimas incluidas.
