MADRID (EP). La patronal Inverco ha valorado positivamente la intención del Gobierno de incentivar los planes de pensiones de empresa, tras el anuncio del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, de que desplazará "la fiscalidad favorable" de los planes individuales de pensiones hacia los planes de empleo. "Estamos de acuerdo en que hay que fomentar el sistema de empleo progresivamente". Esto no va en contra de los planes del sistema individual, sino que está alineado", ha sostenido el presidente de Inverco, Ángel Martínez-Aldama, en declaraciones a Europa Press.
"En la medida en que el sistema de empleo aumente su propia cobertura, entonces no habrá que eliminar una deducción al sistema individual, sino que, simplemente, de forma voluntaria, los individuos no los harán, porque ya tendrán la cobertura empleo", ha explicado Martínez-Aldama. El presidente de la patronal ha lamentado que actualmente el sistema de planes de empleo español, tras 30 años con un sistema de voluntariedad, cubre "escasamente al 10% de los trabajadores".
"Si queremos aumentar la cobertura de los trabajadores a sistemas de capitalización de pensiones para complementar la pensión pública hay que ir a sistemas obligatorios o semiobligatorios", ha reclamado. En este sentido, ha concretado que la voluntariedad de los planes de empleo durante los últimos años ha hecho que no hayan avanzado en el país, frente a las "experiencias de éxito" en Europa con sistemas obligatorios o semiobligatorios por ley, donde se ha ampliado la cobertura a la inmensa mayoría de los trabajadores".
Martínez-Aldama ha animado al Gobierno a "reflexionar sobre la conveniencia de establecer un sistema obligatorio como en Suecia, Suiza o Países Bajos o semi-obligatorio como en el Reino Unido y el año que viene en Irlanda". En el caso británico, ha destacado que "11 millones de trabajadores se han incorporado a un sistema de pensiones que antes no tenían. Ojalá hubiera una cobertura de los planes de empleo al 100% de los trabajadores y no fuera necesario los sistemas individuales, pero lo cierto es que mientras que no haya una cobertura de todos los trabajadores, los sistemas individuales son imprescindibles para complementar las pensiones públicas", ha reiterado.
El 90% restante de los trabajadores "no va a tener un complemento para una pensión pública futura". Además, el número de pensionistas pasará de 9 millones a 15 millones, por lo que será más necesario áun incorporar más recursos para mantener similares prestaciones a las de hoy en día, ha incidido Martínez-Aldama.
En cuanto a una posible reducción de las bonificaciones actuales, Martínez- Aldama considera que "estas declaraciones (del ministro) no parece que sean tan radicales, a priori, de como se pudieran entender". "Estas palabras amplias hay que aterrizarlas", ha afirmado el presidente de Inverco. Actualmente, la normativa permite a los ahorradores desgravar de su declaración de la Renta las aportaciones realizadas por un máximo de 8.000 euros. Estas reducciones en la base imponible del IRPF por "aportaciones a sistemas de previsión social" beneficiaron a 2,7 millones de españoles en 2018, con un importe de 770 millones de euros, según la 'Memoria de beneficios fiscales' que acompañó a los últimos Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Las aportaciones a planes de empresa fueron de 1.246 millones de euros en 2019, por debajo del año anterior, y las prestaciones fueron de 1.581 millones de euros. Por lo tanto, este tipo de vehículo tuvo prestaciones netas de 334 millones de euros y lleva sin registrar más aportaciones que prestaciones desde 2010, lo que demuestra que, por ahora, "no están funcionando".
En el lado contrario, las aportaciones a planes de pensiones privados crecieron un 13% en 2019, hasta los 4.039 millones de euros, mientras que las prestaciones ascendieron a 2.906 millones de euros. En balance, los planes de pensiones del sistema individual ofrecieron prestaciones netas de 1.133 millones de euros en el último año. Estos datos de los planes individuales avalan que se trata de un producto de ahorro que "está funcionando, a pesar de sus limitaciones en las aportaciones y en las ventajas fiscales que se han ido reduciendo", ha valorado Martínez-Aldama.