VALÈNCIA. Conflicto entre la Conselleria de Sanidad y el actual director científico del Instituto de Investigación Sanitaria de La Fe (IIS La Fe) tras denegar al facultativo la prórroga de su actividad hasta los 70 años. Así lo recoge un expediente del departamento de Marciano Gómez, donde deniega la solicitud del especialista en Hematología y Hemoterapia en el departamento, quien fue nombrado hace tres años como director científico del mencionado centro de investigación.
Quien fuera el facultativo encargado del tratamiento del expresidente de la Generalitat Eduardo Zaplana, y que destacó por declaraciones a los medios durante un ingreso hospitalario del ex político enmarcado en su estancia en prisión, asegura en sus alegaciones a la resolución que se trata de una decisión "irracional e injustificada". Según el escrito de la conselleria, a pesar de que la categoría profesional a la que pertenece está incluida en el Plan de Ordenación de Recursos Humanos entre los supuestos que por existencia de necesidades de la organización podrían justificar su autorización, se ha optado por un informe desfavorable conjunto de la Gerencia -con José Luis Poveda al frente- y la Dirección Médica del departamento.
Desde Sanidad señalan que no tiene encomendada actividad asistencial, más allá del control de algunos pacientes de su área de actividad y de la atención a solicitudes de segunda opinión, por lo que su actividad en el servicio de Hematología y Hemoterapia puede asumirse por el resto de especialistas, manteniendo los niveles de calidad asistencial y de prestación de servicios requeridos, sin que el desempeño de sus funciones en el ámbito del citado instituto justifiquen la excepcionalidad en la aplicación de la norma.
Mientras, en su defensa, el doctor Sanz argumenta que la autorización de prolongación de su permanencia en la situación de servicio activo hasta el 15 de enero de 2025 fue aprobada cuando ya desempeñaba sus actuales funciones como director científico del Instituto de Investigación Sanitaria La Fe. En este sentido, asegura que no se han dado cambios en sus responsabilidades profesionales que justifiquen el cambio de criterio.
Como se apuntaba, el informe desfavorable señala que su labor asistencial puede ser asumida por otros especialistas, dado que su rol principal se centra en la investigación. Sin embargo, el doctor Sanz subraya que esta evaluación "se basa únicamente en un aspecto cuantitativo" de su labor profesional, sin considerar "su contribución en investigación y la dirección de proyectos clave". Entre sus logros, el documento destaca el incremento del 30% en la financiación de investigaciones y la obtención de proyectos europeos como Synthia, valorado en más de 24 millones de euros.
El médico también cuestiona la coherencia del criterio administrativo. "Si el desempeño de estas funciones no fue obstáculo para la prolongación entre 2024 y 2025, ¿por qué debería serlo ahora?", apunta. Además, cita precedentes como el de su predecesor, el doctor Máximo Vento, quien permaneció en servicio activo hasta los 70 años. Sanz concluye que una eventual negativa sería "arbitraria por irracional e injustificada", y solicita a la administración una revisión de su decisión en base a los méritos presentados y la ausencia de cambios en las circunstancias desde la última autorización.
Mientras, la Asociación de Pacientes de Leucemia, Linfoma, Mieloma y otras enfermedades de la sangre (Asleuval) ha expresado su "rotundo desacuerdo" con la decisión. En una carta dirigida al conseller de Sanidad, Asleival destaca la "valía profesional y personal" del doctor, quien fue socio fundador de la asociación desde 1992 y "ha mantenido un compromiso continuo con los pacientes". Según la misiva, "el doctor Sanz siempre ha tenido tiempo para nuestras preguntas, sugerencias y propuestas encaminadas a una mejor atención a los pacientes".
La asociación subraya la importancia de la investigación como pilar del futuro de la sanación y califica de "inmejorable" la labor del doctor Sanz al frente del IIS La Fe. Además, cuestiona la pertinencia de la decisión en un contexto de "falta casi crítica de personal cualificado" en el servicio de Hematología y Hemoterapia del hospital.