ALICANTE. El proyecto impulsado por la empresa alicantina Consultores Inzide para instalar una planta de producción de biodiésel y glicerina junto a la carretera de Ocaña queda supeditado inevitablemente a la obtención del beneplácito de la Generalitat, que deberá informar sobre su viabilidad.
La propuesta, que ahora se encuentra sometida al trámite de información pública para la presentación de alegaciones ante la solicitud de licencia ambiental, se elevará a la consideración de la Conselleria de Agua, Medio Ambiente, Infraestructuras y Transportes para que evalúe si se ajusta a los requisitos legales que regulan ese tipo de instalaciones, sin menoscabo de que también deba emitir informe el departamento autonómico de Innovación, Industria, Comercio y Turismo.
Por ahora, el único paso administrativo que se ha cumplimentado respecto a su posible desarrollo ha sido la apertura del expediente de tramitación de su permiso de instalación y actividad, vinculado a su estudio de impacto ambiental, según concretaron fuentes municipales. Será la revisión de esa propuesta la que lleve a determinar si la actividad planteada tiene encaje desde el punto de vista urbanístico y ambiental y si procede requerir documentación adicional para poder evaluarla.
De partida, el planteamiento promovido por Consultores Inzide aspira a desarrollar unas instalaciones capaces de producir 12.000 toneladas de biodiésel y otras 1.150 de glicerina a partir del tratamiento de aceite residual vegetal. La planta de producción quedaría emplazada sobre una parcela que acoge una nave industrial preexistente de 1.200 metros cuadrados de la calle río Turia.
El proyecto incorporado en el trámite de solicitud de licencia ambiental no llega a concretar qué inversión resultaría necesaria para la puesta en marcha de esas instalaciones, ni el plazo estimado para su entrada en funcionamiento.
No obstante, sí se subraya que la planta no entrañará riesgo de deflagración o explosión: uno de los factores que suele asociarse a cualquier proyecto vinculado con el tratamiento de combustibles, que ha sido objeto de controversia en otras propuestas empresariales registradas en Alicante, como la planta de almacenaje de carburantes promovida por XC Business 90 en el muelle 19 del Puerto, todavía pendiente de resolución sobre su licencia diez años después de que se registrase su solicitud, incluso después de que el TSJ reconociese el derecho de la empresa a obtenerla por silencio administrativo positivo, en sentencia pendiente del recurso de casación interpuesto por el Ayuntamiento.
Se da la circunstancia, además, de que el proyecto de la planta de biodiésel de Consultores Inzide -una sociedad vinculada a los administradores de Petro Alacant- cuenta con la firma del ingeniero y administrador de XC Business 90, Dionisio Díez.