Arranca en Valencia el Congreso de la Academia Europea de Alergología e Inmunología Clínica

VALÈNCIA. Con el lema Revolucionando la atención al paciente a través del poder de la ciencia de los datos, ha comenzado el congreso internacional de la EAACI (Academia Europea de Alergología e Inmunología Clínica), centrado este año en destacar el papel primordial de la Alergia y la Inmunología Clínica en el avance de la atención personalizada, la ciencia de los datos y el enfoque holístico de la salud.

El Congreso, que está teniendo lugar en la Feria Valencia, reúne a reputados especialistas en Alergia e Inmunología del mundo. Durante cuatro días, los expertos hablarán sobre las novedades y últimos avances en esta área que tanta repercusión tiene sobre la población en general: las alergias representan un problema de salud pública significativo y abarcan una variedad de condiciones que incluyen alergias a medicamentos, asma y alergias medioambientales, entre otras. Más de 150 millones de europeos padecen algún tipo de enfermedad alérgica¹.

La alergia a medicamentos es una reacción adversa importante que puede tener consecuencias graves. Se estima que afecta a más del 7% de la población mundial². “Los antibióticos, particularmente la penicilina y sus derivados, son los medicamentos que con mayor frecuencia causan reacciones alérgicas”, afirma la Dra. María José Torres, secretaria general de la EAACI.” Los antiinflamatorios no esteroideos AINEs, los medios de contraste radiológico y los quimioterápicos son responsables de una proporción significativa de reacciones”. El manejo de las alergias a medicamentos implica la identificación precisa del medicamento causante, la evitación de su uso y la utilización de alternativas seguras. “La farmacovigilancia y la realización de pruebas de alergia son prácticas comunes para prevenir reacciones adversas graves”, detalla.  

El asma es una enfermedad respiratoria crónica que sufren millones de personas en todo el mundo. Afecta a las vías respiratorias, causando su inflamación y estrechamiento. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente 262 millones de personas en todo el mundo padecen asma, y es una de las principales causas de morbilidad infantil³. Los factores desencadenantes son variados: polen, los ácaros del polvo, el moho o los contaminantes ambientales presentes, por ejemplo, en áreas urbanas, donde la contaminación del aire es un factor desencadenante mucho más significativo que en áreas rurales.

El asma tiene un impacto considerable en la calidad de vida y puede llevar a hospitalizaciones frecuentes si no se maneja adecuadamente, en particular cuando hablamos de asma y obesidad, “dos condiciones de salud prevalentes que tienen un impacto significativo en la calidad de vida de las personas”, destaca el André Moreira, co-presidente del programa científico del Congreso. “Los adultos y niños con obesidad tienen un riesgo significativamente mayor de desarrollar asma en comparación con aquellas con peso normal”. 

Medicina de Precisión e inmunoterapia, ¿el futuro?

Otro de los grandes temas a abordar a lo largo del congreso es el relativo al avance que ha experimentado el tratamiento de las alergias con el desarrollo de la Medicina de Precisión y la Inmunoterapia, con innovaciones que prometen mejorar la eficacia y reducir los efectos secundarios de los tratamientos tradicionales.

La Medicina de Precisión se basa en la personalización del tratamiento médico según las características individuales de cada paciente, incluyendo su genoma, microbioma y otros factores biomédicos y ambientales. Según explica Stefano Del Giacco, presidente de la EAACI, “la identificación de variantes genéticas asociadas con una mayor susceptibilidad a alergias y el uso de biomarcadores específicos han mejorado la gestión de alergias alimentarias, asma y rinitis alérgica permitiendo desarrollar tratamientos más específicos y personalizados, ajustando las terapias para lograr los mejores resultados”.

“La inmunoterapia en el tratamiento de las alergias ha experimentado grandes avances”, afirma Mübeccel Akdis, co-presidenta del programa científico del Congreso. La inmunoterapia consiste en la administración controlada de alérgenos para desensibilizar al sistema inmunológico y reducir la respuesta alérgica. “Se están consiguiendo excelentes resultados en la aplicación de la Inmunoterapia Subcutánea (SCIT) e Inmunoterapia Sublingual (SLIT) para la rinitis alérgica y el asma. Existen otras áreas prometedoras el campo de las Alergias Alimentarias, con terapia oral o mediante personalización de las vacunas alérgicas basadas en el perfil inmunológico del paciente”. Aunque, como subrayan Del Giacco y Akdis, “es necesario seguir investigando para evaluar la seguridad y la eficacia de nuevas terapias y tecnologías”. 

Big data e IA, la gran revolución

El avance de la tecnología permite un análisis más preciso de grandes volúmenes de datos, lo que facilita la identificación de patrones, la predicción de reacciones alérgicas y el desarrollo de tratamientos personalizados. “El uso de Big Data en Alergología permite la recopilación y el análisis de grandes cantidades de datos clínicos, genéticos y ambientales que se utilizan para identificar factores de riesgo y patrones de alergias en diferentes poblaciones”, apunta Mohamed Shamji, vicepresidente del Congreso de la EAACI. 

La Inteligencia Artificial (IA) tiene multitud de aplicaciones. Por ejemplo, mejora la precisión y la rapidez del diagnóstico de alergias mediante el análisis avanzado de datos clínicos y de pruebas de laboratorio. Y es que los algoritmos de IA pueden procesar grandes volúmenes de datos en segundos, identificando patrones que podrían pasar desapercibidos para los humanos. Los modelos de IA también permiten predecir la probabilidad de que ciertos compuestos causen alergias. 

Además, la IA está desempeñando un papel crucial en el desarrollo de nuevos tratamientos alérgicos mediante la identificación de nuevas dianas terapéuticas y la optimización de las moléculas de fármacos. “Puede analizar grandes bibliotecas de compuestos químicos para identificar aquellos con potencial terapéutico para tratar las alergias, e incluso mejorar la adherencia a los tratamientos crónicos mediante el envío de alertas y recordatorios a los pacientes para tomar su medicación o evitar ciertos alérgenos”, destaca Shamji. “Estamos en un momento de grandes y prometedores avances no exentos de retos, como la integración de tecnologías de IA y sistemas de gestión de datos en la práctica clínica diaria”, concluye.