Fotos TINO CALVODÉNIA. "La pandemia ha hecho que mucha gente descubra el transporte marítimo para viajar". Esta frase, del presidente de Baleària, Adolfo Utor, resume el buen momento por el que pasa la naviera a las puertas de celebrar su 25 aniversario, que se cumple el 10 de junio de 2023. Balèaria ha cerrado un 2022 de récord: incremento del tráfico de pasajeros y de mercancías, que fue del 60% y unos beneficios netos de 67 millones de euros. Estas cifras consolidan el liderazgo de la naviera dianense en España, que ve como dos factores, el impulso del turismo a las Baleares, y la apertura de las fronteras de Marruecos y Argelia, han disparado su cifra de negocio hasta los 563 millones, un 42% más que el año anterior.
Pero más allá de los resultados, Baleària afronta el año de su 25 aniversario con unos retos, que el propio Utor ha detallado este viernes, al margen de los proyectos que están en vía administrativa -como la explotación de las nuevas terminales de Barcelona y València- y las oportunidades de mercado que puedan aparecer en el mercado, como la posible venta de Armas Transmediterránea. Pese a ello, Utor ha insistido en que los retos de la compañía son los siguientes:
En estos momento, uno de los principales objetivos de la naviera es poner en marcha los dos nuevos buques que se están construyendo en los astilleros de Gijón, el Margarita Salas, y en Vigo, el Cap de Barbaria, que será eléctrico. Aunque estas nuevas naves saldrán ya con motores duales -que pueden utilizar bien fuel combustible o gas licuado- y que muchas ya han incorporado. El factor del combustible ha sido clave en los resultados de este 2022, pues la posibilidad de poder combinar cualquier de los dos en función de su precio ha rebajado mucho la factura de los costes. El propio Utor ha admitido que mejorar los beneficios en 2023 dependerá en función "de tener un combustible caro a tenerlo barato" y "si baja -el precio del combustible-, podremos acercarnos a unas cifras mayores", ha subrayado Utor, quien ha insistido en que el incremento de facturación dependerá también en si hay "uno o dos barcos más" durante el verano", que son los que están en construcción.
En este contexto, ha reconocido que debido al aumento en el precio del gas natural licuado (GNL), se tuvo que dejar de consumir este combustible durante algunos meses porque los ingresos no habrían sido suficientes. Además, ha destacado que consumieron gasoil pese a saber que se aumentarían las emisiones de CO2: "El ser sostenible no puede pasar por el suicidio".
No obstante, ha confirmado que ya se ha vuelto al GNL en algunos buques, y ha expuesto que en la medida en que GNL sea posible, se consumirá.
Utor ha asegurado que el crecimiento de la empresa está orientado en el norte de África y el Caribe, donde la compañía tiene "un plan a largo plazo" porque en el trafico ferry "está todo por hacer" en Centroamérica.
Así, ha resaltado que está "bastante avanzada" una ruta entre la República Dominicana y Puerto Rico: "Lo estamos planteando de forma seria", ha resaltado Utor, que ha subrayado que tienen "posibilidades" de "avanzar" en el Caribe tras llegar hace una década y que no descarta hacerlo incluso en Cuba.
"En los próximos años, no quiero decir meses, puede haber novedades", ha señalado Utor, que, no obstante, ha resaltado la necesidad de "consolidar bien" el mercado español porque "hay mucha competencia", sobre todo en Canarias, y "hay que afianzar el liderazgo".
Asimismo, respecto a una posible línea entre Asturias y Francia, ha dicho estar "estudiándolo", pero que a raíz del precio del combustible, se ha quedado en "stand by", porque "el precio del combustible hace que uno prefiera consolidar donde ya está".
También ha matizado la dificultad de entrar en el mercado interinsular canario, pues las empresas locales "tienen los mejores slots, los mejores horarios y los mejores atraques", por lo que "hay tráficos más apetecibles".
Otro de los hitos de la empresa para este 2023 es consolidar el incremento de tráfico que ha generado la apertura de la frontera con Marruecos y, por tanto, el aumento de los flujos con Ceuta y Melilla. En el otro lado de la moneda, el cierre de la frontera con Argelia y la reducción de la línea que la naviera ofrece desde València a este país del norte de África.
El impacto de la apertura con Marruecos se dio a partir de mayo de 2022 y, por tanto, ha tenido un fuerte impacto en las cuentas del año pasado. El propio Utor ha reconocido que el inicio del año ha s ido muy bueno para estas rutas y ha augurado que la relocalización de industrias como Renault o Inditex en el norte de África puede "ser bueno" para Baleària.
Dentro los objetivos de 2023, el presidente de la naviera sí que ha hecho mención a los nuevos proyectos de las terminales que Baleària explotará en los puertos de València y Barcelona. De la primera Utor ha dicho, que espera que las obras empiecen "con un horizonte máximo" de seis meses: "Las cosas de palacio van despacio", ha comentado. "A ver si en menos de dos años podemos presentarla", ha afirmado el presidente de la naviera, quien ha destacado que, en estos momentos, València "no tiene una terminal de pasajeros pública en condiciones, ni con unas instalaciones dignas de este siglo", pues está "compuesta por barracones".
De la segunda, la de Barcelona, la terminal de cruceros de Barcelona "progresa adecuadamente", pero "necesitará un poco más de tiempo", ha explicado. Así, ha destacado que "pronto" suscribirá un convenio, aunque está supeditada a dos terminales de cruceros, por lo que el comienzo de las obras será en 2024 o 2025 porque primero deben empezar las obras de los muelles.
Y estas son más o menos las líneas que marcarán el futuro de Baleària, que además de todo sigue teniendo al tráfico con Baleares y entre las islas de Baleares como principal bastión de su negocio, pese a la aparición de nuevos operadores.
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