EN LA MUTANT EL 11 Y 12 DE JUNIO

Ayelen Parolin presenta un programa doble en el que explora lo imprevisible y la figura del payaso

Su experimentación en el campo de la danza la ha llevado a "integrar las imperfecciones del cuerpo y el humor en los espectáculos"

7/06/2021 - 

VALÈNCIA (EP). La reconocida coreógrafa y bailarina argentina establecida en Bruselas Ayelen Parolin llega a La Mutant de València los próximos días 11 y 12 de junio con un programa doble que explora las posibilidades de lo imprevisible y las figuras del payaso y el idiota.

La sala municipal cerrará su apartado coreográfico de la temporada con "la presencia de excepción" de Parolin, cuya experimentación en el campo de la danza la ha llevado a "integrar las imperfecciones del cuerpo y el humor en los espectáculos, dando lugar a un sello muy reconocible que en La Mutant se podrá disfrutar con dos montajes diferentes, Wherever the Music Takes You II y With.

El primero de ellos es una pieza alegre y rítmica de veinte minutos en la que Parolin, transformada en una especie de 'muñeca Michelin', reacciona a la agresión sonora que le provoca el piano de Lea Petras. "Ambas forman un dúo escénico muy particular que pretende burlarse de la época actual, en la que triunfan la seguridad y los algoritmos predictivos y se olvida aquello que es imprevisible, la base del verdadero disfrute", destaca un comunicado.

"En esta pieza lo impredecible es el objeto a seguir, de manera separada para cada una de nosotras, en la elección de las modalidades de trabajo y de escritura. Y que pase lo que tenga que pasar", señala la creadora.

Por su parte, With, protagonizada por los bailarines Alessandro Bernarderschi y Éric Domeneghetty, persigue la reflexión de los espectadores desde la ingenuidad y la parte más "animal" del ser humano y el arte.

"En este dúo me gustaría embarcarme en la exploración en alquimia comenzando por las figuras del idiota y el payaso, examinando su vulnerabilidad, su insuficiencia, su absurdo, y su capacidad para ridiculizar", cuenta Parolin.

"No para representarlos, sino para ubicarlos dentro de nosotros mismos, y usarlo casi como un arma subversiva. Un arma cuyas explosiones pueden ser un medio para explorar la risa y la comedia. Personalmente, no encuentro nada más agradable o poderoso que escuchar a la audiencia reír", concluye.

Noticias relacionadas