VALÈNCIA (EP). El Ayuntamiento de València ha afirmado que el descenso de los niveles del agua del Parque Natural de l'Albufera se debe a la 'perellonà', la inundación invernal de los campos colindantes de arroz, al tiempo que ha asegurado que "se ha controlado el descenso del nivel del agua".
En este sentido, el concejal de Devesa-Albufera, José Gosálbez, ha señalado que "desde la Concejalía se han cerrado las compuertas para evitar que el agua saliera al mar, además de alertar a la Conselleria y a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y se ha aportado al lago ocho hectómetros cúbicos desde la Acequia Real del Júcar".
El proceso en sí mismo es "positivo", pues permite generar hábitat para la fauna acuática y regenerar ambientes acuáticos temporales en los campos de arroz, al tiempo que posibilita el lavado de los productos químicos que se utilizan en su cultivo, ha indicado el consistorio en un comunicado.
La inundación de los campos de arroz ha conllevado que el nivel del lago descienda, por lo que en un año seco como el actual, sin precipitaciones, ha sido necesaria la aportación de agua, pues, de lo contrario, no se hubiera cumplido el nivel establecido de acuerdo a la Orden 5/2018 de la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente que fija "unos mínimos y máximos", han apuntado desde el Ayuntamiento.
Gosálbez ha aseverado que "desde el gobierno municipal seguirán trabajando en la protección, mantenimiento y cuidado de la Devesa-Albufera, por su enorme valor ecológico, como parque natural y como zona residencial de 1.500 personas que llega a unas 6.000 en verano".
"La inundación de los campos colindantes a la laguna, sin haber entradas de agua al lago, reducen su nivel, siempre es habitual por la 'perellonà' que se produce todos los años, pero en años lluviosos la situación se enmascara, y en años secos, como el presente, resulta muy evidente", ha esclarecido Gosálbez.
El Ayuntamiento ha informado del descenso del nivel del lago, por ello han mantenido cerradas las compuertas del Perellonet, Pujol y Perelló desde finales de agosto.