VALÈNCIA. Muchas veces se tiende a hablar del cine valenciano desde el mundo de los autores: de guionistas y realizadores y realizadoras. Incluso de gente que ha destacado en el mundo más técnico o en periferias audiovisuales como la videocreación, los videojuegos o el cine de animación. Sin embargo, también cabe destacar que la buena salud del cine es la de el elenco de interpretación en una tierra que también exporta actores y actrices. Baiana Plana es una de las firmes aspirantes a ello.
Nacida en Buenos Aires, con raíces germanas, portuguesas, argentinas e hispanas, ha desarrollado la práctica totalidad de su formación en València, tanto en la Escuela Off como en el Escalante y La Escuela del Actor. Más tarde, también se ha estado en escuelas de Madrid y Nueva York.
La actriz ha estado involucrada en dos proyectos de los presentados en la última edición de Cinema Jove: por una parte, en el papel de Rebeca en La Banda de Roberto Bueso; y por otra, el corto ambientado en la Guerra Civil del jovencísimo realizador Pablo Pagán, Pawns. De la primera cuenta Baiana Plana que se siente “muy satisfecha por la magnitud que ha alcanzado el proyecto tanto en València como en España”: “he tenido mucha suerte al compartir un equipo de muy buenos actores y técnicos. Por otra parte, Roberto Bueso ha sido un director fantástico”, del que destaca su cercanía.
El film valenciano ha sido un paso en una carrera que lleva recorrido pero que aún está por construir. Próximamente, se estrenará la siguiente producción en la que ha participado, Edgar de Guillermo Barreira Pérez, que tiene su proyección prevista tanto en Estados Unidos como en España. También otros proyectos que solo puede revelar off the record. Sin duda, Baiana Plana no tiene miedo a estar en la pomada: “estoy en un momento en el que me siento muy contenta por las oportunidades que están surgiendo, porque el mundo de la interpretación siempre es muy incierto”, confiesa.
La banda y estos otros proyectos le ha generado un principio de expectativas. Ella, que nace del mundo de las webseries y YouTube, ve una gran oportunidad en las series y en cómo Netflix está sabiendo adaptar formatos de internet con flexibilidad y acierto. “Las series están pegando muy fuerte, mientras que, con el teatro, en València no llegas a final de mes”, comenta.
Otro de su paso importante fue ser la de escribir su propio personaje en el corto All fired up, de Miracle Candela. “Tuve la oportunidad de abrir mi cajón de ideas y pensar en qué quería proyectar como actriz. Es verdad que muchas veces escribirte personajes es una manera de tomar las riendas de tu carrera de una manera más activa”, explica.
- ¿Se nota fuera de València cuando una actriz o un actor es valenciano?
- Las escuelas valencianas son muy buenas y se diferencian bastante. También la formación depende mucho de las ganas que tengas, pero creo que los actores y actrices valencianas tienen suerte de la formación que reciben.
Preguntada por si ve su futuro en València o fuera de ella, Baiana Plana admite que “la terreta” siempre la va a tirar más, pero que ni a corto ni a largo plazo se ve rechazando una buena oportunidad por el lugar dónde surja. “València es más tranquila y agradable, pero una parte de mí siempre estará dispuesta coger las cosas y viajar”, admite.
Sobre el panorama del audiovisual valenciano, cree que “hace falta un cambio de perspectiva”: “València tiene muy buenas oportunidades, pero falta apoyar un poco más proyectos diferentes. À Punt falta que crezca y se tiene que dar más bombo al cine valenciano para mostrarlo fuera”, opina. Y añade: “creo que La banda es un ejemplo: quiero animar a la gente a que le de una oportunidad al cine valenciano”.