MADRID. Desde la perspectiva de los beneficios, se espera que 2023 sea un ejercicio marcadamente positivo para los bancos españoles. La rentabilidad antes de provisiones, la primera línea de defensa contra las pérdidas crediticias, seguirá fortaleciéndose. Sin embargo, a medida que se deteriora el panorama macroeconómico, el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de España recomiendan prudencia con respecto a las políticas de planificación del capital.
En 2022, los bancos españoles aumentaron los dividendos y, en algunos casos, llevaron a cabo importantes recompras de acciones. Ahora, los ratios de reparto de dividendos se sitúan en el extremo superior de las previsiones iniciales de los bancos o se han revisado al alza.
Para los grandes bancos de nuestra muestra, el pay out -porcentaje del beneficio que se destina a dividendos- se sitúa entre el 40% y el 60%. La formación orgánica de capital fue satisfactoria el año pasado. En algunos casos, compensó con creces las remuneraciones y otros impactos del mercado.
Bancos por encima o en línea con los objetivos
Fuente: Datos de las empresas, Scope Ratings (Kutxabank no tiene un objetivo público. Objetivo medio MT CET1 %)
Los ratios de capital básico se sitúan por encima o en línea con los objetivos a medio plazo de los bancos, con cierto margen de mejora. Con las perspectivas alcistas de rentabilidad para 2023, no se descartan aumentos de la remuneración de los accionistas.
Aunque en términos absolutos el ratio CET1 -medida de fortaleza financiera de referencia utilizada por el regulador- medio de los bancos españoles es menos favorable que el del sector de otros países europeos, creemos que representa una segunda línea de defensa adecuada. Consideramos que los bancos españoles están bien capitalizados y en el tercer trimestre de 2022 la mediana del colchón del ratio CET1 con respecto al requisito mínimo se situaba en torno a 420 puntos básicos; mientras la mediana del colchón con respecto al MDA -importe máximo distribuible- en 390 puntos básicos.
De cara al futuro, los colchones seguirán siendo sólidos pese a los recientes aumentos de los requisitos que afectan a varias entidades. Para BBVA y Banco Santander, el requisito de Pilar 2 aumentó ligeramente -concretamente 21 y 8 puntos básicos respectivamente- debido a las expectativas de provisión prudencial del BCE sobre el calendario de provisiones para insolvencias, que BBVA deducía previamente del CET1.
El colchón de CET1 supera los 300 puntos básicos
Fuente: Datos de las empresas, Scope Ratings (Datos del tercer trimestre de 2022)
CaixaBank experimentó un aumento de 125 puntos básicos en su colchón O-SII, que ahora está totalmente integrado y corresponde a su dimensión sistémica tras la fusión con Bankia; mientras que Banco Sabadell vio repuntar su colchón de capital anticíclico en 19 puntos básicos, impulsado por el requisito del Reino Unido , dado que es propietario del TSB Bank). Por su parte, Unicaja elevó su requisito de Pilar 2 en 10 puntos básicos.
Todos estos aumentos son marginales y están dentro de la capacidad de los bancos para generar capital orgánicamente, dados los vientos de cola de los ingresos por intereses.
Dado que los efectos de la ralentización del crecimiento sobre la calidad de los activos sólo se materializan con cierto retraso, esperamos que los bancos adopten una postura conservadora respecto a las distribuciones adicionales. Esto no sólo tranquilizará a los reguladores, sino también a los inversores en crédito.
Chiara Romano es directora asociada de instituciones financieras de Scope Ratings