VALÈNCIA. Más de medio año hace que desde la Vicepresidencia Primera y Conselleria de Cultura, liderada por Vicente Barrera (Vox), se cesó al entonces gerente del Consorci de Museus, cuya sede es el Centre del Carme, José Luis Pérez Pont. Y no es el único cese que se ha llevado a cabo. En estos meses se ha cambiado a la dirección general del Institut Valencià de Cultura, a los tres directores adjuntos del IVC, la dirección del Espai d’Art Contemporáni de Castelló… la diferencia es que en estos últimos casos ya conocemos a los sucesores de los cesados. No así en el Centre del Carme. O no del todo.
Tras el cese de Pérez Pont se anunció que el liderazgo del organismo se repartiría entre dos personas, en lugar de una como había sido hasta ahora, separando la gerencia de la dirección artística. En el primer caso, se seleccionó de manera interna a Nicolás Bugeda para ocupar la plaza, mientras que la segunda la ocupa de manera temporal Vicente Samper, a la espera de que se publique un concurso de selección que todavía no se ha puesto en marcha, aunque esto podría solventarse en cuestión de días.
Así lo ha declarado Barrera en respuesta a la pregunta del portavoz adjunto del PSPV-PSOE, José Chulvi, que le ha recriminado que este puesto se encuentre vacante "sin ninguna razón". El conseller, por su parte, ha avanzado en Les Corts que será “en unos días” cuando se publique la convocatoria para la dirección artística del Consorci de Museus, una promesa que dibuja un mapa temporal en el que la institución podría iniciar curso con nuevo director artístico, aunque alcanzaría el año de ‘transición’. En este sentido, este año el centro ha funcionado en los últimos meses con una programación mixta compuesta en gran medida por proyectos heredados, a los que se han sumado otros de nuevo cuño.
Con todo, desde el grupo socialista se ha criticado nuevamente el cambio en la gestión del CCCC. “Está vacía [la plaza] desde que, sin razón y solo por hacer mal, depuraron a un profesional de reconocido prestigio, José Luis Pérez Pont, y pusieron un palo en la rueda de uno de los espacios más importantes y dinámicos de la oferta cultural valenciana”, ha declarado Chulvi. Por su parte, Barrera ha subrayado que el cese fue por “hechos contrastados” y se remitió a los informes que en su día presentaron para avalar el cese así como la sentencia por el grafiti en el claustro del centro cultural.
Un nuevo modelo para el Circuit Cultural
No ha sido la única cuestión cultural relevante que ha salido a relucir en el pleno de Les Corts. Otro asunto candente es el futuro del Circuit Cultural Valencià (CCV), un proyecto de colaboración entre el Institut Valencià de Cultura (IVC) y distintos ayuntamiento de las Comunitat para llevar programación escénica a los municipios participantes. Hace años que una auditoría de Hacienda censuró el modelo de contratación de compañías y profesionales artísticos al considerar que estos pagos se realizan “sin contraprestación a favor del IVC” y “sin tramitar el oportuno expediente administrativo”, un tirón de orejas que no tuvo efectos en el modelo, hasta ahora.
Desde Cultura se anunció hace meses un replanteamiento que, explicaron en un comunicado, no se debe a una cuestión “política” sino “jurídica” a causa de las “irregularidades producidas como consecuencia del pago de facturas sin expediente administrativo”. Fue en este caso la portavoz de cultura del Grupo Parlamentario Popular en Les Corts, Paqui Bartual, quien interpeló a Barrera para mostrar su preocupación por el futuro del proyecto. “El Circuit Cultural Valencià atraviesa una etapa de incertidumbre es su gestión después de meses de incógnita y frente a una posible reestructuración. Estamos muy preocupados por la situación actual ya que la programación cultural de muchos municipios está en el aire”, expresó la popular.
“Lamento tener que confirmar sus sospechas. Efectivamente el Circuit Cultural Valencià, que es un arma positiva, se estaba manejando de forma irregular jurídica y administrativamente”, expresó en su respuesta Barrera, quien afeó al gobierno del Botànic la gestión del proyecto. Entonces, ¿cuál es la solución a partir de ahora? “Estamos ultimando la creación de un nuevo modelo propio adaptado a la normativa vigente con el que el nuevo IVC pondrá a la alcance de los municipios programaciones de espectáculos, artes escénicas, musical y audiovisuales […] No había que inventar la pólvora para dar solución a este asunto”. Este nuevo modelo será a través de un convenio entre el IVC y la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) que, explicó, permitirá “ampliar la red de municipios” beneficiarios, un “nuevo modelo de propuesta” que se cristalizará en “menos” de un año.