VALÈNCIA (EP). La hipótesis de aplicar una cancelación a las deudas contraídas por los Estados de la eurozona como consecuencia de las medidas de apoyo social y económico para hacer frente a la pandemia iría en contra de reglas europeas y podría tener amplias consecuencias desestabilizadoras, según ha advertido el representante italiano en el directorio del Banco Central Europeo (BCE), Fabio Panetta.
"Hacerlo contravendría los tratados", subraya el banquero central en una entrevista con el diario portugués Expresso.
"Debemos recordar que toda deuda es crédito. Si cancelamos una deuda, cancelamos el crédito correspondiente y esto podría tener consecuencias desestabilizadoras más amplias. Solo el crecimiento puede protegernos de las deudas", añade.
La cancelación de la deuda pública contraída por los Estados como consecuencia de las medidas de apoyo a la economía desplegadas durante la pandemia ha sido puesta sobre la mesa por Riccardo Fraccaro, subsecretario del gabinete del Gobierno de Italia y uno de los asesores más próximos a Giuseppe Conte, primer ministro del país transalpino.
En declaraciones a Bloomberg este miércoles, Fraccaro planteaba que la política monetaria debe apoyar a las políticas fiscales expansivas de los Estados miembros de todas las formas posibles, lo que podría incluir la posibilidad de "cancelar los bonos soberanos comprados durante la pandemia o extender perpetuamente su vencimiento".
En este sentido, el gobernador del Banco de Francia y miembro del Consejo de Gobierno del BCE, François Villeroy de Galhau, también ha advertido este viernes de que la cancelación de la deuda pública acumulada por la respuesta a la pandemia supondría explorar "una senda muy peligrosa". en referencia al impacto que tal medida tendría sobre la confianza de los inversores.
"Considerar la cancelación de la deuda sería un senda muy peligrosa", afirma el banquero central galo en una entrevista con el diario Ouest France, donde recuerda que cuando se introdujo el euro, todos los Estados, se comprometieron a reembolsar siempre al Banco Central. "Es un pacto de confianza absolutamente imprescindible", subraya.