Asimismo, el grupo de especialistas del programa de conservación (EEP) considera "prioritario" el papel de Bioparc Valencia para formar un grupo de rinocerontes blancos sureños (Ceratotherium simum simum) dentro de la estrategia de cría controlada y durante estos meses se han realizado varias acciones en este sentido, ha indicado el parque en un comunicado.
Tras la llegada en octubre de la joven Ami y la integración de Nombula se produjo la pérdida del macho Cirilo. Por ello, el comité europeo ha agilizado la incorporación de los ejemplares Kwanza y Martin, de 30 años, que ya han tenido descendencia anteriormente.
El tamaño y características de los rinocerontes conlleva una gran complejidad en los traslados, así como la utilización de transportes especializados y personal cualificado. En estos casos todo ha sucedido con normalidad, la hembra ha llegado procedente de CERZA Centre d'Etude et de Recherche Zoologique Augeron (Francia) y el macho de Serengeti-Park Hodenhagen (Alemania).
Por el momento ambos se encuentran en proceso de aclimatación en las instalaciones interiores y bajo el protocolo de seguimiento del equipo de cuidado animal. El objetivo, han indicado desde el parque, es garantizar el máximo bienestar de los animales y que las distintas uniones se realicen de forma progresiva.
Actualmente, en el recinto multiespecie que recrea la sabana se puede contemplar a las hembras Ami y Nombula junto con cebras de Hartmann (Equus zebra hartmannae), avestruces (Struthio camelus), marabús (Leptoptilos crumeniferus), pelícanos (Pelecanus onocrotalus) e ibis sagrados (Threskiornis aethiopicus).