VALÈNCIA (EP). El personal de cuidado animal de Bioparc Valencia ha intensificado las medidas para garantizar el bienestar de los animales ante la alerta por elevadas temperaturas, con helados gigantes al gusto de cada especie, lluvia artificial y una dieta especial.
El equipo veterinario realiza una transición paulatina desde los meses de primavera hasta que se establece definitivamente el protocolo estival. La alimentación es fundamental y se adapta para disminuir el aporte calórico e incrementar la hidratación.
El objetivo es que todos los animales, según las distintas especies o características particulares, dispongan de las mejores atenciones y estos días uno de los recursos favoritos para los animales son los jugosos y refrescantes helados, según ha explicado el parque en un comunicado.
Elaborados teniendo en cuenta las diversas necesidades dietéticas de más de 150 especies distintas, los formatos, tamaños y contenidos varían: enormes helados de verdura para elefantes o hipopótamos; bloques de hielo que esconden en su interior carne cruda que despierta el instinto de leones o sorbetes congelados con frutas, verdura o semillas para primates como chimpancés y lémures.
Igualmente importante es propiciar un ambiente agradable. Rías, estanques o el espectacular lago de elefantes son algunos ejemplos que durante todo el año y especialmente ahora utilizan los animales para refrescarse.
Estos días las personas que visitan el parque han podido contemplar a la manada de elefantes con las crías Makena de un año y Malik de cuatro meses jugando bajo la cascada de este singular recinto.
La lluvia artificial regularmente programada durante la jornada es especialmente bienvenida por los grupos de rinocerontes o cebras; así como los baños de barro. Todas estas actuaciones se encuentran dentro de los denominados "enriquecimientos ambientales" que estimulan sus comportamientos naturales con componentes de diversión y entretenimiento.
Un aspecto en el que la comunidad científica está haciendo mayor hincapié por su significante aportación para enfriar el ambiente y reducir la temperatura en las zonas urbanas es la vegetación. Según Bioparc, gracias a la colección de árboles, palmeras, arbustos y plantas, la sensación térmica llega a ser sensiblemente inferior a la de otros espacios de la ciudad.