Blanes (Tomarial): “Las empresas necesitan auditoría laboral porque sus obligaciones son casi infinitas”

VALÈNCIA (VP). La pandemia marcó un punto de inflexión para muchas empresas en materia laboral: una situación extraordinaria, que obligó a las compañías a tomar muchas decisiones en muy poco tiempo, adaptándose a una legislación nueva y cambiante. Los expertos destacan la complejidad que supone gestionar el creciente aluvión normativo en materia laboral, que ha incorporado muchas obligaciones nuevas. Santiago Blanes, socio de Tomarial Abogados, Economistas y Consultores recomienda la auditoría laboral como una herramienta útil y práctica que ayuda a una correcta gestión y, sobre todo, evita problemas futuros que pueden suponer un coste elevado.

- ¿Hasta qué punto se ha complicado la gestión laboral para las empresas? 

- Cada día son más las obligaciones del empresario en materia laboral. Por eso se ha hecho imprescindible destinar cada vez más tiempo y recursos a cumplir con la normativa laboral. Es una carga que demasiadas veces entorpece los procesos productivos de las empresas y se convierte en un problema. A las empresas les cuesta incluso estar al día para conocer cuáles son sus obligaciones, por lo que muchas están en un "fuera de juego" constante.

- ¿Qué normas destacaría de las últimas aprobadas?

- Solo por hablar de algunas de las obligaciones de las empresas que se han incorporado en los últimos tiempos podemos citar los Planes de Igualdad, registros retributivos, protocolos de acoso, protección de datos, uso de nuevas tecnologías en el entorno laboral, el teletrabajo, las muy recientes medidas laborales que incorpora la Ley Orgánica de garantía integral de la libertad sexual, todo lo relacionado con la prevención de riesgos, comprobación de la aplicación correcta de las condiciones de trabajo… y así un largo etcétera. Es una carga importante para la gestión empresarial, que requiere de asesoramiento para una correcta gestión.

- ¿Cómo se puede ayudar a las empresas a mejorar esta gestión?

- Creo que lo primero es transmitirles toda la información de una manera clara, que sepan qué es lo que deben hacer en cada momento y cuáles son los plazos que deben planificarse para cumplir con la legislación. Como asesores que somos, debemos estar al lado del empresario, acompañándole en la toma de decisiones en el ámbito laboral. Pero no solo eso, además debemos ofrecerle la posibilidad de tenga un diagnóstico de su empresa en esta materia: que disponga de una visión completa y pueda tomar medidas con la antelación suficiente para evitar problemas laborales y en materia de Seguridad Social. Parta conocer la situación de la empresa, la Auditoría laboral es una gran herramienta.

- ¿Qué es y qué aporta la auditoría laboral?

- La auditoría laboral no es una solución en sí misma, pero sí es la base para encontrarla. Se trata de revisar en profundidad todos los aspectos laborales de la empresa, y en atención a la información obtenida, realizar un diagnóstico a la medida: así se informa a la empresa de cuál es su situación exacta, en qué puntos o cuestiones está fallando, los riesgos que tiene en materia laboral y las posibles soluciones para evitarlos o minimizarlos. Se pueden desactivar problemas laborales futuros que tendrían un coste muy elevado no solo en lo económico, sino en el funcionamiento de la empresa.

- ¿Qué problemas o conflictos puede resolver la auditoría laboral?

- Son muchísimos. Por ejemplo, la empresa que a día de hoy, teniendo obligación, no ha hecho su Plan de Igualdad, o no tiene el registro retributivo, o no está aplicando el convenio colectivo adecuado, de lo que se deriva que está retribuyendo mal a sus trabajadores y tiene un riesgo potencial de pago de atrasos y de infracotización a la Seguridad Social. Es clave que la empresa conozca todas sus obligaciones y pueda atenderlas con un asesoramiento correcto y una planificación.

- ¿Debería ser el asesoramiento laboral más preventivo?

- Sí, porque demasiadas veces las empresas recurren a nosotros a posteriori, cuando es tarde para poner solucionar el problema. Pienso que las empresas deberían valorar la tranquilidad que supone un buen asesoramiento que contemple su vertiente preventiva. Insisto en que debemos acompañar al empresario en su toma de decisiones, haciéndole ver la importancia de la parte laboral de sus acciones. Es la mejor ayuda para evitar problemas y que puedan centrarse en los aspectos productivos de su negocio.