VALÈNCIA (EFE). La Comisión Europea recortó este viernes su previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) de España en 2023 hasta el 1 %, más de un punto menos de lo que calculaba hace unos meses, pero cree que la economía española esquivará la recesión técnica en un ejercicio en el que la inflación bajará al 4,8 %.
Las nuevas previsiones económicas del Ejecutivo comunitario prevén, en particular, una contracción del 0,3 % en el último trimestre de este año y una tasa del 0 % en los tres primeros meses de 2023, evitando así encadenar dos trimestres en negativo, lo que supondría una recesión técnica.
Por el contrario, Bruselas eleva medio punto la proyección de expansión del PIB este año, desde el 4 % que anunció en julio hasta el 4,5 % que recoge el documento presentado en una rueda de prensa por el comisario de Economía, Paolo Gentiloni.
La Comisión Europea prevé que la economía de la eurozona entre en recesión en el último trimestre de este año pero anticipa que cerrará 2023 con un crecimiento del 0,3 %, más de un punto por debajo de lo que estimó en verano, según las previsiones macroeconómicas de otoño publicadas este viernes.
Bruselas revisa además al alza su proyección de inflación para el año próximo en más de dos puntos y la sitúa en el 6,1 %.
En 2022 el avance del PIB en el área de la moneda única será del 3,2 %, seis décimas por encima de lo anticipado en julio gracias a un primer semestre mejor de lo esperado y a pesar de que la economía se contraerá ya un 0,5 % en el cuarto trimestre, en tanto que la inflación llegará a tocar un máximo del 8,5 %, nueve décimas superior a la última proyección.
Para el conjunto de la Unión Europea, Bruselas anticipa una tendencia similar: eleva su previsión de crecimiento en cinco décimas para este año, al 3,3 %, y la recorta en 1,2 puntos para el próximo, al 0,3 %, al tiempo que revisa al alza su previsión de inflación en un punto para 2022, al 9,3 %, y en 2,4 puntos para 2023, al 7 %.