BRUSELAS. La quinta reunión ordinaria del Comité Mixto UE-Reino Unido sobre la aplicación del Acuerdo de Retirada ha concluido con un acuerdo para su aplicación a partir del 1 de enero de 20121 y para seguir negociando el próximo año. El vicepresidente de la Comisión Europea encargado de Relaciones Interinstitucionales y Prospectiva, Maroš ŠefČoviČ, declaró que se ha trabajado sin descanso para asegurar que “tanto la letra como el espíritu del Acuerdo de Retirada”, incluido el Protocolo sobre Irlanda e Irlanda del Norte, “se respeten y se traduzcan en soluciones viables”.
Presidida por el Canciller Michael Gove, mediante videoconferencia, en esta reunión se han respaldado algunas decisiones formales y otras soluciones prácticas, cumpliendo el objetivo general de proteger el Acuerdo del Viernes Santo, de Belfast, para evitar un frontera con la isla de Irlanda, y mantener la paz y la estabilidad. Este acuerdo, alcanzado el pasado lunes, fue esencial.
Las negociaciones a lo largo del año no han estado exentas de roces y tiranteces, llegando a hacer perder la paciencia al jefe negociador europeo, Michel Barnier. El Protocolo sobre Irlanda del Norte proporciona a las empresas y a las personas la estabilidad necesarias, al tiempo que mantiene la integridad del mercado único. La Comisión Europea garantiza dos prioridades principales de la Unió Europea (UE). Una de ellas es la presencia de la UE en Irlanda del Norte.
La segunda prioridad es que el Reino Unido se ha comprometido a retirar todas las partes contenciosas de su Ley de mercado interior y a abstenerse de introducir partes similares en su Ley de impuestos. Ello implicó la solución a temas tan importantes, en este momento de pandemia, como el suministro de medicamentos. Estas soluciones serán de carácter temporal y con condiciones estrictas.
“También nos aseguramos de que los derechos de nuestros ciudadanos y nacionales del Reino Unido estén protegidos”, explicó el vicepresidente europeo. Otro tema que se ha puesto sobre la mesa es el segundo Informe Conjunto sobre Derechos de Residencia, acordándose su publicación.
Este acuerdo proporciona una actualización sobre los esquemas de residencia nacional en la UE y el Reino Unido. Y también describe las medidas de divulgación y asistencia para apoyar a los ciudadanos de la UE y a los nacionales del Reino Unido, incluidos los grupos vulnerables, o para informar a las partes interesadas, como los empleadores.
Respecto a la seguridad jurídica de todas las personas afectadas, más del 90% de los ciudadanos del Reino Unido que residen en la UE ya pueden solicitar un nuevo estado de residencia en los Estados miembros. El Reino Unido también ha brindado garantías en cuanto a su sistema de asentamiento para los ciudadanos de la UE. El Comité Conjunto continuará reuniéndose al menos trimestralmente durante el próximo año.