VALÈNCIA (VP). La Comunitat Valenciana, con 899,3 euros por persona, es la undécima comunidad en la que más dinero se dedicó a la compra de seguros en el año 2018, superada por superada por Madrid (1.631 euros), Aragón (1.434,6 euros), Cataluña (1.408,7 euros), Navarra (1.352,5 euros), Baleares (1.222 euros), La Rioja (1.207,4 euros), País Vasco (1.132,3 euros), Galicia (980,8 euros) y Cantabria (919,6 euros). El gasto en seguros por persona en la Comunidad Valenciana representa 470,2 euros menos que la media, según el informe 'El mercado español de seguros en 2018', elaborado por el Servicio de Estudios de Mapfre y publicado por Fundación Mapfre.
Por su parte, los españoles gastaron 1.369,5 euros de media en seguros en 2018, lo que supone un aumento de 11,7 euros respecto al año anterior (1.357,8 euros). El menor desembolso en el segmento de seguros de Vida (616,8 euros por persona frente a los 629,4 euros de 2017) fue compensado por el mayor gasto en los seguros de No Vida (752,7 euros frente a 728,3 del ejercicio precedente), según se desprende de dicho informe.
La industria aseguradora española ingresó un total de 64.377 millones de euros en el ejercicio 2018, un 1,5% más que el año anterior. Representa el 5,33% del Producto Interior Bruto (PIB) frente al 5,44% registrado en 2017, y se aleja del récord histórico alcanzado en 2016. En el mercado internacional, España adelanta a Brasil en el ranking de la industria aseguradora y pasa a ocupar el puesto 14.
En Vida, se ha moderado la caída de primas (-1,4% contra -5,6% en 2017), hasta los 28.995 millones, y el ahorro gestionado mantiene un crecimiento positivo y una tendencia ascendente, con un incremento de las provisiones técnicas de un 2,6%, hasta los 188.467 millones de euros. Las inversiones de las entidades aseguradoras aumentaron un 1,1% en el ejercicio 2018, hasta los 295.287 millones de euros, de las que el 55,1% corresponden a activos de deuda pública y el 20,6% a renta fija corporativa. Las inversiones en renta variable parecen haber iniciado un proceso de recuperación hasta alcanzar el 5,2% en 2018, máximo de los últimos diez años.
Por tanto, durante 2018 se confirma la ralentización iniciada del mercado asegurador un año antes. Esto ha elevado la Brecha de Protección del Seguro (BPS), que representa la diferencia existente entre la cobertura de seguros que es económicamente necesaria y beneficiosa para la sociedad y la cantidad de dicha cobertura efectivamente adquirida. En definitiva, permite definir el mercado potencial de seguros o el tamaño del mercado que podría alcanzarse en el caso de que esta brecha desapareciera.
En este sentido, la brecha ha aumentado en 2018 hasta los 29.000 millones de euros (800.000 euros más que en 2017). Este insuficiente desarrollo se plasma principalmente en el segmento de los seguros de Vida. Muestra de ello es que, en 2018, el 96,1% de la BPS (27.847 millones) correspondió a este ramo. Es por eso que, como se desprende del informe, el segmento de los seguros de Vida debería crecer a una tasa promedio anual de manera sostenida del 7% a lo largo de los próximos diez años para ser capaz de cerrar esa brecha.