VALÈNCIA. CaixaBank pone a disposición de sus clientes la primera tarjeta que se comercializa en España fabricada con material 100% reciclado a través de su producto Visa &Pay. El soporte material de esta tarjeta, que los clientes interesados pueden solicitar ya tanto en oficinas como a través del canal online www.CaixaBank.es, procede íntegramente de PVC reciclado a partir de fuentes como desechos de la industria de la construcción, reciclaje de bolsas de plástico o residuos de otras tarjetas, entre otros.
La comercialización de Visa &Pay de plástico reciclado es un paso más para la implantación de materiales reciclados en toda la gama de tarjetas de CaixaBank, que supondría la sustitución aproximada de más de 18 millones de plásticos actualmente existentes en el mercado.
La entidad presidida por Jordi Gual y cuyo consejero delegado es Gonzalo Gortázar es pionera en España en la introducción de materiales reciclados para productos financieros. Ya en 2019 toda la gama de tarjetas regalo de la entidad (unas 150.000 unidades al año) pasó a estar fabricada por un material biodegradable (ácido poliláctico, procedente de almidón de maíz), para favorecer su reciclaje y su eliminación sin residuos al fin de su vida útil (máximo de dos años, al tratarse de tarjetas regalo).
CaixaBank prevé comercializar 10.000 unidades de esta tarjeta durante 2020. La nueva Visa & Pay de plástico reciclado está diseñada para ser utilizada como la tarjeta habitual de los clientes.
Desde el punto de vista de los servicios financieros que aporta este nuevo producto, cabe destacar que la Visa &Pay de plástico reciclado es técnicamente una tarjeta de crédito Visa &Pay, aunque incorpora innovaciones respecto a los estándares habituales, como la posibilidad de ahorrar con cada compra una cantidad por redondeo que finalmente, si se desea, se podra donar a una ong medioambiental.
Además, CaixaBank está comprometida con la compensación de la huella de carbono y por ello, en esta campaña, la entidad financiará la plantación de un árbol por cada nueva tarjeta.
CaixaBank es una de las entidades financieras líderes en mitigar los efectos del cambio climático. La organización CDP ha incluido a CaixaBank, por sexto año consecutivo, en el índice de empresas líderes en la lucha contra el cambio climático.
En febrero de 2019, la entidad hizo pública una Declaración sobre Cambio Climático, una propuesta con cinco líneas de actuación que incluye compromisos relacionados con la descarbonización: financiar las soluciones al cambio climático; gestionar los riesgos derivados del cambio climático; minimizar y compensar la huella de carbono; colaborar con otras organizaciones para el avance conjunto; e informar de nuestros progresos de forma transparente.
Para ello, CaixaBank potencia la digitalización de su parque de tarjetas, financia proyectos de energías renovables (2.453 millones de euros en 2019), proyectos ligados a la mejora en índices de sostenibilidad o indicadores ambientales (919 millones de euros) y préstamos verdes (1.546 millones de dólares en 2019). La entidad financiera también cuenta con varias líneas de ecoPréstamos y ecoMicropréstamos (10,2 millones de euros en EconFinanciación en 2019).
Al mismo tiempo, CaixaBank participa en el mercado de bonos verdes para la inversión sostenible. En el ranking mundial de Bloomberg, CaixaBank ocupa la 13º posición en financiación de préstamos verdes sindicados por volumen.
Asimismo, la entidad realiza una cuidada gestión de los riesgos ambientales, para evitar, minimizar, mitigar y remediar en lo posible los riesgos potenciales para el entorno o la comunidad. En este sentido, el Consejo de Administración de CaixaBank aprobó, también en febrero de 2019, una Política de Gestión de Riesgo Medioambiental en la que se establecen exclusiones para sectores con potenciales impactos negativos en el medioambiente.
CaixaBank tiene en marcha una política activa de reducción de emisiones, que ha logrado reducirlas en un 80% desde 2009. Además, la entidad contrata energía eléctrica proveniente casi en su totalidad de fuentes renovables y es la única en España que compensa el 100% de todas sus emisiones calculadas, incluidas las emisiones indirectas.
El banco fue la primera organización española incluida en la lista RE100, una iniciativa que pretende incrementar la demanda y el suministro de energías limpias. Asimismo, forma parte del Grupo Español de Crecimiento Verde, que aboga por el crecimiento económico ligado a una economía baja en carbono.
La entidad también se ha sumado al Compromiso Colectivo para la Acción Climática de Naciones Unidas, una declaración que se crea en el marco de los Principios de Banca Responsable para que el sector financiero movilice sus productos, servicios y relaciones para facilitar la transición económica hacia un modelo sostenible. El compromiso pretende alinear las carteras de entidades financieras de todo el mundo para financiar una economía baja en carbono, con el objetivo de que el calentamiento global se mantenga por debajo de los dos grados centígrados.